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Dimite el Alto Comisionado para la Paz en Colombia

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Víctor G. Ricardo, Alto Comisionado para la Paz en Colombia, el hombre que logró consolidar y encausar las mesas de diálogo con las FARC, el grupo guerrillero más antiguo del país, renunció ayer a su cargo. Aunque era un hecho anunciado (desde el año pasado se rumoreaba su dimisión) causó sorpresa porque se produce cuando se concreta el acuerdo que podría dar inicio al diálogo con la otra guerrilla, el ELN.De inmediato se nombró en su reemplazo a Camilo Gómez, actual secretario de la presidencia y uno de los cinco negociadores del Gobierno con las FARC. En su carta de dimisión, Ricardo asegura que ha cumplido su ciclo y por eso deja el cargo; pide disculpas por sus errores y asegura que sus aciertos "serán un legado a la paz" del país.

No es ningún secreto, sin embargo, que detrás de la renuncia existen graves amenazas contra su vida. Hace apenas dos días las Autodefensas Unidas de Colombia le enviaron una carta acusándole, una vez más , de haber "entregado todo a la guerrilla".

El relevo en el timonel de la política de paz se da en medio de airados cuestionamientos a la actitud de las FARC . En sus primeras declaraciones, el nuevo comisionado calificó de "desafortunada actitud" la ley 002, ley tributaria promulgada por el mando central de esta organización en la que anuncian que toda persona "natural o jurídica" con patrimonio superior a un millón de dólares (180 millones de pesetas) deberá pagar un impuesto de paz. El que no pague será secuestrado.

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