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Más de la mitad de los 542 discapacitados psíquicos vizcaínos atendidos están en residencias fuera del territorio

Más de la mitad de los 543 discapacitados psíquicos vizcaínos ingresados en residencias se encuentran fuera de este territorio, diseminados en 37 centros diferentes. La Diputación de Vizcaya pretende crear en los próximos tres años un centenar de plazas que acabe con este éxodo a otras provincias, según dijo ayer el responsable de Acción Social, Ricardo Ansotegi.Actualmente en Vizcaya hay 258 personas con discapacidad psíquica en ocho residencias, cuatro de la Diputación foral y otros cuatro concertadas con las asociaciones Gorabide y Aspace, que trabajan con este colectivo. En cambio, fuera del territorio hay 285 personas ingresadas en 37 centros conveniados. "Nos consta que personas que están en en centros de Palencia o Valladolid están a gusto y tal vez quieran seguir allí, pero nuestro compromiso es crear plazas en Vizcaya, como no podía ser de otra manera", dijo Ansotegi.

El diputado de Acción Social adelantó que en los próximos meses se aprobará nuevos proyectos que ya están en gestación, bien mediante convenios o a través de la construcción de infraestructuras propias de la Diputación. El más inminente es la nueva residencia en el centro Plazakola, ubicado entre Berriatua y Markina, que ofrecerá 19 plazas, la mayoría de ellas destinadas a personas con autismo o psicosis infantil. Se inaugurará en junio.

Ansotegi presentó ayer el convenio firmado con la asociación Gorabide, una institución sin ánimo de lucro con amplia experiencia en la gestión de servicios residenciales para los disminuidos psíquicos. La nueva residencia, que tendrá 330 metros cuadrados de superficie, se unirá al centro de día, el taller ocupacional y un centro especial de empleo para estos discapacitados existentes en el complejo Plazakola.

Diez de las 17 plazas nuevas se reservarán a personas con autismo o psicosis infantil, ya que existe "un déficit de equipamiento en los servicios sociales". Los usuarios de la residencia deberán tener entre 18 y 60 años y acreditar vecindad administrativa -del beneficiario y de sus padres o tutores- en Vizcaya con una antigüedad no inferior a los tres años.

El diputado foral vizcaíno reveló que el coste máximo por persona y día será de 15.261 pesetas, con una ayuda económica de la Diputación en función de los ingresos del usuario y su familia. "Puede llegar a cubrirse el 100%", añadió.

El centro perseguirá potenciar la autonomía del discapacitado, su integración en el entorno social y recuperar las relaciones con sus familias y amigos. Además del personal de atención diurna y nocturna, la residencia para disminuidos psíquicos tendrá un psiquiatra, un psicólogo, un trabajador social y un médico rehabilitador.

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