La Generalitat exige concreción al Fòrum 2004 para financiarlo
El anteproyecto del programa del Fòrum de les Cultures 2004 no ha servido para convencer al Gobierno catalán, al menos, en un aspecto: el financiero. Tras la última reunión del consejo de administración del Fòrum, celebrada en marzo, el Gobierno catalán ha instado a que se concrete más qué es lo que pretende el evento del año 2004, "porque de otra forma no se puede empezar a hacer números de financiación".
El presupuesto del Fòrum se ha situado en torno a los 60.000 millones de pesetas. La Administración central todavía no se ha pronunciado sobre el anteproyecto presentado. El Gobierno catalán cree que esta cifra global no permite "precisar ni a las administraciones ni a las empresas que colaboren o patrocinen el Fòrum", explicaron fuentes de Presidencia de la Generalitat. De los 60.000 millones calculados -sin contar el coste de las infraestructuras para que el recinto del Besòs esté listo en 2004-, el 43% correspondería a las administraciones. Cada una de las tres representadas en el Fòrum abonaría algo más de 8.700 millones de pesetas de forma directa o mediante los ingresos por la organización de loterías y quinielas. También se situaba el precio medio de las entradas en 3.000 pesetas y la recaudación global de ellas se fijaba en torno a los 15.000 millones de pesetas. El restante 30% de los 60.000 millones correspondería a la parte de la financiación de las empresas privadas por patrocinios o concesiones.
Estas cifras se presentaron en función de un programa: congresos, simposios, festival de las artes, del mar y tres cumbres internacionales: una de la ONU, otra de la Unesco y una tercera todavía por determinar. Y en función de esa información, los organizadores del Fòrum esperaban que las administraciones opinaran sobre el anteproyecto en la reunión del consejo del pasado marzo.
No fue así. Por un lado, los representantes de la administración central alegaron que, en realidad, se encontraban en una situación de interinidad puesto que el Gobierno resultante tras las elecciones legislativas del 12 de marzo no se había constituido. El Ayuntamiento de Barcelona tampoco presentó un estudio sobre el anteproyecto.
Los representantes del Gobierno catalán fueron los únicos que presentaron una contrapropuesta para empezar a hablar, sobre todo de dinero. Para la Generalitat, el Fòrum es un evento que no genera expectativas de autofinanciación y que, además, no cuenta con ingresos de derechos televisivos. El Gobierno catalán cree imprescindible concretar en qué consistirá exactamente el Fòrum para definir el modelo de financiación, entre otras cosas para evitar un déficit que "fuese imposible de cubrir".
La Generalitat también exige más información acerca del uso y el régimen de gestión de las nuevas infraestructuras que hay que realizar alrededor del Fòrum y de forma especial al edificio emblemático del Fòrum, que deberá levantarse en la gran explanada junto a la desembocadura del Besòs y punto de nacimiento de la avenida Diagonal. Inquieta, sobre todo, saber qué destino tendrá después del Fòrum. El alcalde se comprometió a garantizar que este edificio central no moriría con el Fòrum, pero todavía no se ha realizado un proyecto concreto.
En cuanto al calendario y el temario del mismo, el Gobierno catalán se muestra de acuerdo con la gran mayoría de las propuestas, aunque matiza que, por ejemplo, el peso de la literatura y las artes plásticas debería potenciarse más.
El ejecutivo que encabeza Jordi Pujol también considera que el Fòrum debería buscar alguna fórmula para conectar todos los acontecimientos culturales y sociales producidos por la sociedad y por las diferentes ciudades de Cataluña ya que la fórmula de las subsedes no tiene sentido en un evento de ese tipo
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