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La OTAN detiene a un serbio expresidente de Bosnia acusado de crímenes de guerra

Momcilo Krajisnic, el lugarteniente del criminal de guerra serbobosnio más buscado, Radovan Karadzic, fue capturado por tropas de la OTAN durante la madrugada de ayer en una espectacular operación secreta liderada por soldados franceses, que irrumpieron con explosivos en su casa de Pale, a 15 kilómetros de Sarajevo. Krajisnic, de 55 años y ex presidente bosnio en representación de los serbios, fue trasladado bajo estrictas medidas de seguridad a Holanda, donde fue internado en la cárcel del Tribunal Penal Internacional para los crímenes de guerra en la antigua Yugoslavia.

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La Haya se llena

Krajisnic se ha convertido en el preso número 37 en la cárcel de Scheveningen, cerca de La Haya. Es también el detenido de mayor rango político en manos de la justicia internacional, ya que fue copresidente de Bosnia entre 1996 y 1998.El secretario general de la OTAN, George Robertson, no ocultó su satisfacción por la captura del líder serbobosnio buscado por la justicia internacional. "Son buenas noticias para la justicia y buenas noticias para la gente de Bosnia-Herzegovina", declaró Robertson, quien realizó una clara advertencia a los criminales de guerra que aún quedan impunes en los Balcanes: "Para aquellos individuos que todavía están prófugos, lo repito, el cerco se está estrechando".

Testigos que presenciaron su detención, citados por la agencia estatal de de noticias yugoslava Tanjug, dijeron que la operación para capturar a Krajisnic duró sólo diez minutos. A las 3.17 horas de ayer, el líder ultranacionalista serbobosnio fue sacado de su casa descalzo y en pijama por un grupo de soldados enmascarados, en presencia de sus padres y dos de sus tres hijos.

Krajisnic figuraba en la lista secreta de criminales de guerra elaborada por la fiscalía del tribunal. Fue acusado de genocidio, crímines contra la humanidad, crímenes de guerra y graves violaciones de la Convención de Ginebra. Se trata de delitos cometidos entre el 1 de julio de 1991 y el 31 de diciembre de 1992.

Carla del Ponte, la fiscal jefe del tribunal para la antigua Yugoslavia, advirtió de que de ser capturado también Radovan Karadzic, ambos se enfrentarán a un juicio común. Del Ponte aseguró que la captura de este ideólogo de las purgas étnicas contra musulmanes y croatas era "extremadamente importante y demuestra la estrategia de la fiscalia de acusar a personas en los mayores niveles de responsabilidad".

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El nuevo prisionero de la cárcel de Scheveningen fue mano derecha y ayudante de Karadzic durante la mayor parte de la guerra de Bosnia (1992-1995). Ferviente ultranacionalista, se apoyaba en su religiosidad para justificar plenamente la separación de grupos, de acuerdo a su etnia e identidad religiosa, a cualquier precio.

Acusado de genocidio

Al final de la guerra, cuando Karadzic fue acusado de genocidio por el Tribunal Penal Internacional y desapareció de sus funciones públicas, fue inmediatamente reemplazado por Krajisnic como representante de los serbios de Bosnia. El acusado, que fue presidente del Parlamento serbio de Bosnia entre octubre de 1991 y noviembre de 1995, es conocido en Pale como un hombre acaudalado, después de haber sido un alto ejecutivo de una empresa de fabricación de componentes para reactores nucleares.

La vinculación entre Krajisnic y Karadzic, calificados como los cerebros del genocidio en Bosnia, es antigua. Ambos militaron en el ultranacionalista Partido Democrático Serbio, pero ya en la década de los ochenta fueron procesados conjuntamente por fraude en turbios negocios inmobiliarios.

Krajisnic, radicalmente opuesto a cualquier tipo de reconciliacion con musulmanes y croatas, pudo moverse libremente durante las negociaciones internacionales de los Acuerdos de Dayton, en 1995. El lugarteniente de Karadzic recibió el apodo de Míster No por su postura obstinada e inflexible durante negociaciones de paz.

Tribunal para la ex Yugoslavia: www.un.org/icty

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