Las casas se venden en la mitad de tiempo que en 1994
Dos contrasentidos se han instalado en el mercado inmobiliario del País Vasco: un piso nuevo cuesta menos que uno usado y, por otra parte, en un momento en que el ritmo de construcción de viviendas en Euskadi ha alcanzado su techo, con casi 19.000 pisos iniciados, la oferta es más reducida que nunca.La media de viviendas en venta cada trimestre desde 1994 superaba las 12.000. Esa cifra empieza a caer en 1998 y en 1999 el descenso es más acusado: en el último trimestre del año sólo había en oferta 8.774 pisos en el mercado libre, contando los nuevos y usados. "Quien va a adquirir una vivienda se encuentra cada vez con menos posibilidades de compra en las inmobiliarias. Es una paradoja, porque el ritmo de construcción es más alto que nunca", señala el viceconsejero de Vivienda, Miguel Ángel Delgado.
La presión ejercida por una demanda que ha aumentado de manera muy significativa en los últimos tiempos, fundamentalmente animada por el descenso de los tipos de interés y la mejora del mercado de trabajo, ha conllevado el afloramiento de necesidades, sobre todo de vivienda principal. Esta necesidad de piso se había acumulado a lo largo del tiempo por una insuficiente e inadecuada oferta. "Se ha producido una acelaración en las ventas, reducción de los remanentes y, consecuentemente un incremento de precios", razona Delgado.
Así, desde 1994, el plazo de venta de un piso se ha acortado a la mitad. Ha pasado de los 3,8 meses de media que costaba vender una vivienda en 1994 a 2,1 en el último trimestre de 1999. En Álava, la necesidad es más acuciante que en el resto de Euskadi y ese plazo es incluso menor: 1,7 meses. Eso significa, para el caso de la vivienda nueva, que si el promotor decide poner en venta un piso sobre el plano dos meses antes de empezar la promoción, cuando la inicie tendrá vendidos todos los pisos.
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