Una muestra exhibe cien bocetos atribuidos a Francis Bacon El material expuesto en Dublín contradice la versión del pintor sobre su forma de arte
Francis Bacon, el pintor contemporáneo más prestigioso en el Reino Unido, solía declarar que atacaba los cuadros directamente, sin bocetos ni bosquejos ni dibujos previos. Sólo guiado por su intuición. Sin embargo, una exposición de cien obras inaugurada esta semana en el Museo de Arte Moderno de Dublín arroja un punto de duda sobre su anárquica manera de atravesar el oscuro túnel de la creación.
Las obras pertenecen a Barry Joule, íntimo amigo de Bacon durante más de 20 años. En ellas se observa cómo la mano del pintor iba componiendo las líneas maestras de sus cuadros a traves de fotografías, tomadas en muchos casos de la prensa. Se ve, por ejemplo, cómo en un campo de rugby erige una estructura de líneas uniendo los ojos y los genitales de los jugadores. También aparecen ciclistas, boxeadores, jugadores de cricket, Las Meninas de Velázquez, Hitler... Joule, vecino de Bacon en 1978, conoció al pintor al final de una tormenta del cálido verano de ese mismo año. Bacon le pidió ayuda para reparar los desperfectos de una gotera. Y desde entonces Joule se convirtió en su asistente, su conductor y su hombre de confianza.
Mala educación
"El 25 de abril de 1992", relata Joule, "Francis Bacon me pidió que lo llevara hacia el aeropuerto de Heathrow porque quería viajar a Madrid a ver a su novio. Me pasé por su casa y me dio estas obras. Me las regaló así, de improviso, sin yo esperarlo. Y las metí en el maletero del coche antes de llevarlo a Heathrow. Yo temía que me pasara lo mismo que diez años atrás, cuando me regaló un autorretrato suyo y al día siguiente me lo reclamó diciendo: "Si uno no puede ser maleducado con los amigos, ¿con quien va a poder serlo?".
"Pero, desgraciadamente, Francis ya nunca más me iba a pedir esas obras, porque tres días después, el 28 de abril de 1992, murió en Madrid".
Barry Joule recuerda que Bacon siempre se violentaba cuando se le preguntaba si no usaba bocetos o dibujos antes de enfrentarse al lienzo. "Eludía el tema. Bacon no fue a ninguna escuela de arte, aprendió por sí solo. Y tal vez le daba vergüenza mostrar cómo iba planificando sus cuadros".
Los herederos de Francis Bacon no están convencidos de que las obras surgieran de la mano del pintor. Por eso han encargado a una comisión de expertos que se pronuncie. "Hasta ahora", señala Barry Joule, "todos los expertos menos uno aseguran que estas piezas son suyas. Y a mí no me cabe ninguna duda. Si al final la comisión da su visto bueno, yo cederé el 90% de esta exposición a la Hugh Lane Gallery de Dublín, que por algo es su ciudad natal".
La exposición permanecerá durante tres meses en el museo de Arte Moderno. Los expertos no han fijado ninguna fecha para pronunciarse, aunque se prevé que lo hagan una vez clausurada la muestra.
La Huge Lane Gallery de Dublín acogerá a finales de este año las 10.000 piezas que se encontraron en el estudio londinense del pintor. Todas ellas han sido fotografiadas, embaladas y listas para exponerlas en una meticulosa reconstrucción del estudio del artista en Dublín.
Babelia
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