Expulsados desde Cataluña otros 134 'sin papeles' procedentes de Francia

La policía interceptó a lo largo de la mañana de ayer en varios puntos de Cataluña a un total de 146 extranjeros no comunitarios procedentes de Francia, de los cuales tan sólo 12 tenían la documentación preceptiva en regla y por tanto tienen derecho a quedarse en España. Los 134 restantes fueron devueltos a Francia en la misma tarde de ayer, según informó la policía. La operación que ha permitido localizarlos forma parte del dispositivo policial desplegado desde la entrada en vigor de la nueva Ley de Extranjería y que anteayer interceptó en un talgo que cubría la línea París-Barcelona a otros 97 pakistaníes, de los cuales sólo dos tenían permiso de residencia.Entre los extranjeros interceptados ayer, mayoritariamente pakistaníes, también había un grupo de rumanos, indios, gambianos, un argelino y un marroquí. La policía los localizó en diferentes estaciones de trenes y autobuses en distintos puntos de Cataluña. En Portbou y La Jonquera fueron interceptados más de 50 extranjeros procedentes de diferentes localidades francesas. En la estación de autobuses de Girona la policía truncó el viaje de un grupo de pakistaníes y rumanos que venían desde Alemania en la línea que cubría el trayecto Múnich-Barcelona-Madrid. Y en las estaciones de Puigcerdà y Barcelona fueron interceptados finalmente otros 45.

Devueltos a Francia

Todos los inmigrantes interceptados fueron entregados inmediatamente a las autoridades francesas en virtud del acuerdo de readmisión hispano-francés, que establece que los inmigrantes ilegales que pasan de Francia a España o viceversa no son repatriados a su país de origen, sino que son readmitidos por el país de procedencia.

Joan Maria Xiol, presidente de la comisión de abogados del turno de oficio, explicó ayer que, según la Ley de Extranjería los inmigrantes no recibieron la asistencia jurídica gratuita a la que tenían derecho debido a una interpretación "peculiar" de la policía de la citada norma.

Por su parte, Rosa González, portavoz de SOS Racismo, declaró ayer que están convencidos de que detrás de esta ola de inmigrantes ilegales hay "una mafia que se ha aprovechado de la desinformación del proceso de regulación de la Ley de Extranjería".