Monteseirín acepta la oferta de los sindicatos para arbitrar en el conflicto de Isla Mágica

El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, aceptó ayer el papel de "mediador" en el conflicto laboral entre los sindicatos y las nuevas gestoras de Isla Mágica, las cajas de ahorro El Monte, Unicaja y Caja San Fernando. La invitación partió de los sindicatos que mantuvieron una reunión ayer con el alcalde en el Ayuntamiento, a la que estaban invitados los accionistas de la empresa, que no acudieron. Sánchez Monteseirín se mostró "optimista" ya que ambas partes mantienen una postura "razonable". La dirección de Isla Mágica no se pronunció sobre la mediación del alcalde.

El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, no perdió ni un segundo y tras la reunión con los sindicatos, a la que no asistieron representantes de la dirección del parque, mostró su carácter conciliador: "Hay buena actitud por parte de los trabajadores y de las cajas, y eso es lo fundamental, una buena actitud de diálogo y que todos consideren que el proyecto es viable". Sánchez Monteseirín afirmó ser "optimista" y confía en que se dé "una solución muy pronta que nos permita abrir el parque antes de Semana Santa". Aunque las centrales sindicales llegaron hasta el Ayuntamiento en pie de guerra. "Las cajas de ahorro parece que quieren llevar al límite el conflicto con los trabajadores de Isla Mágica para utilizar los terrenos del parque temático con otro fines en un marco especulativo". Estas graves acusaciones partieron de los secretarios provinciales de los sindicatos UGT y CC OO, Isidoro Romero y Antonio Torrijos, contra las cajas de ahorro, El Monte, Caja San Fernando y Unicaja, por su posición en la búsqueda de un acuerdo con los empleados, como nuevas gestoras del parque temático.

Los responsables sindicales sacaron a colación "Tablada o el Cortijo del Cuarto", donde, según la versión de los sindicatos, las cajas [El Monte y Caja San Fernando] ya habrían dado ejemplos de llevar a cabo una política especulativa. También denunciaron una campaña orquestada para "satanizar a los trabajadores", cuando "a socios como Ogden o Aldeasa no se les ha exigido explicaciones por la nefasta gestión de parque".

El presidente del comité de empresa de Isla Mágica, Manuel Fernández, aseguró que las cajas saben que los trabajadores están dispuestos a aceptar el 90% de las peticiones, y entre ellas ya están: un nuevo expediente de regulación de empleo, que afectará a unas 100 personas de las 750 que componen la plantilla, la congelación salarial y la externalización de servicios. En el punto que separa a ambas partes, la situación de los fijos discontinuos por horas, Fernández explicó que los sindicatos exigen un número mínimo de horas garantizadas, 400. "Esto significa la reducción en un 60% de las horas garantizadas que recogía el anterior convenio". Los trabajadores celebrarán una reunión informativa el próximo jueves, un día antes del consejo de administración de Isla Mágica.

La portavoz de Izquierda Unida (IU) en el Ayuntamiento de Sevilla, Paula Garvín, cree necesaria una clara y activa intervención por parte del Consistorio, que respalde las reivindicaciones de los trabajadores. Su grupo presentará una pregunta en el próximo pleno sobre este tema. Garvín fue muy crítica con los empresarios del parque a los que culpó de la situación "problemática" de Isla Mágica .

Para la portavoz de IU es incomprensible que se cargue sobre los trabajadores la viabilidad del parque: "No se va a acabar con deudas multimillonarias por el ahorro de 72 millones", (cantidad que los sindicatos han calculado que se ahorraría la empresa según el nuevo convenio). También cargó contra el presidente de los empresarios andaluces, Rafael Álvarez Colunga, por "negarse a votar para solucionar el conflicto en la reunión del Consejo Económico y Social".