El Parlamento aboga por crear centros de encuentro para familias separadas
Los padres separados que han perdido la custodia de sus hijos y que no disponen de un lugar para poder verles dispondrán de unos pisos para relacionarse con ellos. El pleno del Parlamento aprobó ayer una proposición encomendando al Departamento de Justicia el diseño de un programa de pisos de encuentro, similar al que ya funciona en otras ciudades de España y en varios países de Europa. Todos los partidos refrendaron la iniciativa, que fue transaccionada a partir de una propuesta del PSE.
Antes de poner en marcha el programa, el departamento deberá sondear a las asociaciones de padres separados para conocer sus principales demandas y necesidades y determinar así las características de estos pisos. Por ejemplo, entre las cuestiones a resolver está saber si se podrá pernoctar en ellos, si serán centros de día o podrán utilizarse durante todo un fin de semana. Entre otros servicios, este tipo de centros actúan como un lugar neutral en el que los cónyuges separados que no se llevan bien puedan dejar al niño para que sea recogido por el padre o la madre al que le toque visitarlo. También se utiliza como una casa por horas para la convivencia del progenitor que no dispone de una vivienda más adecuada para acoger a su hijo.La parlamentaria socialista Gemma Zabaleta, autora de la iniciativa, recordó que muchas relaciones mantrimoniales y de pareja se rompen y, dada la situación económica en que quedan sus miembros, no encuentran los recursos necesarios para poder "reorganizarse y conciliar la ruptura con el mantenimiento de la relación con los hijos".
La proposición aprobada por el Parlamento también reclama que los pisos de encuentro dispongan un equipo profesional especializado en rupturas familiares, como asistentes sociales, psicólogos, psicopedagogos y orientadores familiares. La Federación vasca de Madres y Padres Separados ya ha solicitado al Gobierno autónomo la puesta en marcha de estos pisos. Un reciente estudio sobre separación matrimonial reveló que España contará en 2010 con más del doble de divorcios que en la actualidad. Así, la cifra pasará de un divorcio por cada siete uniones que se produce ahora, a uno por cada dos o tres matrimonios que se celebren, lo que da idea de la magnitud de la nueva realidad social que se avecina.
Lista de espera
Por otra parte, el consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, tuvo que responder ayer en el pleno del Parlamento a una pregunta de la parlamentaria socialista Carmen Asiain sobre las medidas que va a adoptar para corregir los tiempos que deben esperar los pacientes para operarse o para ser tratados por un especialista. Asiain reclamó más médicos. Según Inclán, la lista de espera en la comunidad es la mejor de España: dos meses para operaciones y 21 días de media para las consultas de los especialistas.
