Volker Rühe anuncia que no será candidato a la presidencia de la CDU alemana El ex ministro de Defensa intenta cerrar el paso a Angela Merkel, a quien apoyan las bases

El ex ministro de Defensa, Volker Rühe, anunció ayer que renuncia a competir por la presidencia de la Unión Cristiana Democrática de Alemania (CDU) y ha dejado claro que no apoyará a Angela Merkel, la secretaria general, que esta semana ha mostrado su capacidad de despertar simpatías también en el oeste del país y ha obtenido respaldo del empresariado. Mientras tanto, el partido liberal (FDP) decidió ayer durante su congreso extraordinario en Rotenburg an der Fulda mantener su apoyo al jefe de Gobierno de Hesse, Roland Koch, de la CDU.

El FDP, que hasta la mayoría de edad de los Verdes ha sido el fiel de la política alemana, y la CDU gobiernan en coalición el land de Hesse desde las elecciones de febrero de 1999. El viernes, sin embargo, la fiscalía local decidió iniciar una inspección de aquellas elecciones para saber si fueron financiadas de forma irregular con dinero de las cuentas clandestinas de la CDU. Las dos posturas que se enfrentaban ayer en Rotenburg an der Fulda eran la de la presidenta de la organización de Hesse, Ruth Wagner, partidaria de seguir apoyando a Roland Koch, pese a las reiteradas mentiras de éste, y la del presidente del FDP, Wolfgang Gerhard, partidario de reemplazar a Koch, pero no de romper la coalición. Al final ganó por 166 votos contra 132 la postura defendida por Ruth Wagner. En varias entrevistas, entre ellas una que publica hoy Die Welt am Sonntag, Rühe ha dicho que quisiera ver a un "jefe de Gobierno regional" en el puesto que Wolfgang Schäuble dejará libre en el congreso de la CDU que se celebrará en abril. Entre los jefes de Gobierno regionales, el favorito es el veterano Kurt Biedenkopf, de 70 años, que dirige el land de Sajonia. El político, un hombre respetado por su capacidad intelectual, ha hecho saber que estaría dispuesto a dirigir el partido con ciertas condiciones, señalan medios de la CDU. Biedenkopf, que al igual que el jefe de Gobierno de Baviera, Edmund Stoiber es partidario de la Europa de las regiones, fue un rival de Helmut Kohl. Su elección, sin embargo, supondría que la CDU prefiere una figura de transición al "nuevo comienzo" del que han hablado sus dirigentes en los momentos más críticos vividos por el partido en los últimos meses.

Rühe, que fue elegido vicepresidente del grupo parlamentario esta semana en Berlín, fue derrotado en las elecciones en el land de Schleswig-Holstein el pasado domingo. En comparación con los temores de desastre electoral que albergaba la CDU, su derrota fue discreta, pero el ex ministro ha decidido no exponerse a nuevas humillaciones. A ello puede haber contribuido la conversación nocturna que mantuvieron Rühe junto con Biedenkopf, el jefe del grupo parlamentario, Friedrich Merz y Edmund Stoiber, en Lübeck al término de la campaña electoral y los problemas que ha tenido Rühe con la organización de la CDU en Schleswig Holstein. Tras una serie de reproches mutuos, Rühe se ha dado de baja de la organización de la CDU en este land y se ha inscrito en Hamburgo, su ciudad de origen. Se da la circunstancia de que la organización de la CDU en aquella ciudad ha dado su apoyo a Merkel.

La secretaria general ha obtenido esta semana el apoyo de militantes de base en una conferencia regional en Recklinghausen, en el land de Renania del Norte-Westfalia, donde está la organización de la CDU más importante de Alemania. También ha obtenido el apoyo del presidente de la Asociación Federal de la Industria Alemana (BDI), Hans Olaf Henkel. Éste dijo que Merkel había impresionado a los empresarios con su comportamiento y que éstos la valoraban mucho por su capacidad de dirigir el partido.

Todo indica que los círculos establecidos de la CDU no están dispuestos a dar a Merkel el mismo reconocimiento que los militantes de base y los empresarios. Rühe manifestó que Merkel se ha ganado la "simpatía emocional" en las conferencias del partido, pero agregó que "los sentimientos sólo pueden ser una parte del proceso". "El proceso de candidaturas no debe ser alimentado sólo emotivamente desde abajo, sino que debe ser dirigido conceptualmente desde arriba", manifestó el ex ministro de Defensa. Las afirmaciones de Rühe han causado malestar entre los representantes de las jóvenes generaciones de la CDU, es decir, los menores de 50 años.

El jefe del Gobierno del Sarre, Peter Müller, se ha mostrado en contra de limitarse a los jefes del partido a la hora de elegir presidente y manifestó que Merkel es apropiada para cualquier puesto en la CDU y puede "desempeñar con éxito el cargo de presidenta federal". Entre las ideas que se barajan en la CDU para superar la crisis está la creación de nuevas estructuras que posibilitaran la elección de Bidenkopf como presidente y de Merkel como presidenta adjunta ejecutiva. Medios próximos a Merkel citados por Die Welt rechazan la creación de nuevas estructuras burocráticas y recuerdan que lo que el partido se plantea es "un nuevo comienzo". El procedimiento y la designación de candidatos a la presidencia de la CDU se decidirá el próximo día 20.