PSOE e IU reúnen en Madrid a miles de manifestantes contra las fundaciones sanitarias
Unos 10.000 manifestantes -8.000 según fuentes policiales, 60.000 según los organizadores- protestaron ayer contra las fundaciones públicas sanitarias ideadas por el Gobierno del PP. En un ambiente festivo, la marcha discurrió entre la plaza de Colón y la sede del Ministerio de Sanidad, en el paseo del Prado, donde Luis Eduardo Aute leyó una declaración en favor de la sanidad pública. Antes de la marcha, el minisrto de Sanidad, José Manuel Romay, calificó el acto de electoralista. "Este ministro no se entera de nada", replicó Francisco Frutos al final de la manifestación.
La manifestación la convocaban, bajo el lema "Defiende tu salud, defiende lo público", los sindicatos UGT y Comisiones Obreras, los formaciones políticas PSOE e IU, la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos y la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad pública.Acudieron los principales líderes políticos y sindicales. Además de Francisco Frutos, candidatos a la presidencia del Gobierno por IU, estuvieron Cándido Méndez, secretario general de UGT; Rodolfo Benito, secretario de CCOO de Madrid; Ángeles Amador, portavoz del PSOE en sanidad, y Ángeles Maestro, portavoz de IU. Desfilaron también importantes representantes de ambas formaciones políticas en la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid así como los alcaldes socialistas de Getafe y Alcobendas.
"Esto nos pasa con un gobierno facha", "España va bien; una mierda para el PP" y "La sanidad ni se compra ni se vende" fueron algunos de los lemas más coreados.
Esta manifestación se convocó sólo unos días después de que el Consejo de Ministros aprobara el 14 de enero pasado el real decreto de Nuevas Formas de Gestión del Insalud. Este decreto desarrolla el reglamento de las fundaciones públicas sanitarias, nueva fórmula jurídica instituida por el Gobierno del PP que permitirá a los actuales hospitales y centros públicos del Insalud convertirse en sociedades públicas que mantendrán el carácter estatutario de su personal, pero con capacidad para enajenar sus bienes, arrendarlos, contratar a su propio personal cuando sea preciso, incentivar a su personal y obtener fuentes alternativas de financiación a través de donaciones. Con esta fórmula, el partido en el Gobierno cree que agilizará la gestión de los hospitales y centros de salud gracias al nivel de autonomía que les confiere. Para los convocantes de la manifestación (y otros agentes sociales, como la Organización Médica Colegial o la CESM, el sindicato médico mayoritario), esta fórmula sirve de poco a la hora de agilizar la gestión y, sin embargo, ésta será menos transparente. Los centros deberán presentar buenos resultados económicos, lo que introducirá elementos mercantilistas. Para las organizaciones mencionadas, el principal agravante del proyecto del PP es que supone una fragmentación de la red sanitaria.
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