_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

MIS DEBERES Una rubia anda suelta MARUJA TORRES

Me había prometido a mí misma que no volvería al tema de la web de mi, nuestro Jose: ando sobrada de temáticas, estos días. Pero al saber que ayer era su cumpleaños (así es él, cumple con todo), me precipité hacia el sitio do cibernéticamente mora. Qué ternura: sus contemploráneos (es decir: el equipo que a su alrededor le contempla con arrobo) le habían introducido un pastelillo con velas que lanzaban destellos y que, al pincharlo, voilà: "¡Feliz cumpleaños, Presidente!". Pero lo mejor estaba por venir. Una poesía: "Feliz, feliz en tu día./ Presidente que Dios te bendiga./ Que reine la paz en tu vida./ Y que cumplas muchos más...". Firmado: Milikito, que no es el seudónimo de Pimentel, sino de Emilio Aragón Sr.Pero basta de romanticismos y de mirar hacia el pasado, precisamente yo, que quiero entrar en el siglo XXI pisando fuerte y con zapatos de aguja, y por eso me he apuntado al último vicio funesto que arrasa en la red, algo casi tan acreditado como la pedofilia belga pero sin tener que descender a otro abismo que el estético. Hablo de la teofilia. Sabido es que, entre los cargos públicos y la militancia femenina del PP se da un porcentaje de rubias por metro cuadrado muy superior (estadísticas en mano) al que pudimos apreciar en las honras fúnebres de Roger Vadim. Mas conviene precisar. La rubia leona tipo Isabel Tocino ya no se lleva, porque puede enredarse las mechas con el Medio Ambiente. O con Agatha Ruiz de la Prada, que -permítanme la digresión- se presenta a senadora por Los Verdes (me encanta este país pleno de oportunidades: cualquiera puede llegar a cualquier cosa), y que brindó por ello (ver el último ¡Hola!, en colores) tras practicar su primera acción saboteadora, esto es, vestir a Vicenta Rico, que se presenta para congresista verde, con una bata del mismo color adornada en lo pectoral con tremenda cala o lirio de esos blancos con pilila amarilla en el centro. Parte buena del asunto: si la gentil diseñadora sale elegida, su escaño la incapacitará para presidir Greenpeace, y eso evitará a los miembros de esta institución tener que practicar los abordajes vestidos de gnomos con geranios.

Retomo el hilo: la rubia pepera tipo oleaje encrespado queda opacada, en el XXI, por quien luce práctica melena corta con flequillo. Es decir, Teófila Martínez, Teo para los creyentes, que suele complementar su peinado con un muy apañado surtido de chales. ¿Serán los terroríficos pashmina, que se sacan de los pelos de la barba de una cabra en vías de extinción? ¿O son de pelo de barba del muy español y acreditado macho cabrío, que también anda por ahí extinguiéndose, sin que nos apesadumbremos? La melena corta a lo paje de Teo es ideal, sabes, porque te sirve lo mismo para ir a un estreno de Norma Duval que para presentar el programa del PP en Andalucía, que más bien parece una promesa hecha a la Macarena tras una trepidante noche de manzanilla y churros.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_