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Clos niega que los urbanos tengan cupos de multas

Blanca Cia

El conflicto que arrastra la Guardia Urbana con el Ayuntamiento de Barcelona en la negociación del convenio colectivo volvió a ser ayer uno de los puntos de discusión en el plenario. Esta vez a raíz de una propuesta de acuerdo planteada por el grupo de CiU y respaldada por el PP a propósito de un supuesto "cupo" de multas que deben imponer los agentes de la Guardia Urbana. El edil convergente Josep Miró i Ardèvol instó al equipo de gobierno a que aclarase si es cierto que los efectivos de la policía municipal tienen la obligación de imponer un mínimo de sanciones al día, lo que, en su opinión, sería "aberrante".Miró insistió en que de unas declaraciones hechas por el alcalde, Joan Clos, se deducía que existía tal obligaciòn. La respuesta del equipo de gobierno fue negativa: "Los agentes no tienen un cupo de multas", señaló el alcalde. La responsable de Movilidad y Seguridad del Ayuntamiento, Carme San Miguel, precisó que los agentes deben detallar cada día en una hoja a qué se han dedicado y durante cuánto tiempo, documento que sirve para controlar su actividad y elaborar las estadísticas del cuerpo, pero no implica que los agentes deban imponer una cifra mínima de sanciones. "Es una forma de controlar el rendimiento de los agentes, no de obligarles a poner multas", insistió la regidora.

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San Miguel negó también que se hayan impuesto sanciones a algún agente por no poner multas, pero avanzó: "Probablemente consideraremos si ponemos sanciones por falta de rendimiento en el servicio" (un agente ha sido avisado por ello).

2,8 multas por guardia

Aunque en principio la respuesta pareció satisfacer a la oposición, una vez acabado el pleno el regidor convergente Joan Puigdollers insistió en que los agentes están obligados a poner un determinado número de multas. Apoyó está información en una lista sobre la previsión de actividades para el año 1997.

En ella se especifican una serie de actividades sancionadoras -como las multas por estacionamiento en doble fila, en la calzada o en el carril bus, entre otras- con unas previsiones y los resultados finalmente obtenidos. Por ejemplo, se establece una previsión de 25 multas por estacionamiento en pasos de peatones durante las mañanas del mes de enero de 1997 y las multas impuestas fueron 88. Parecidas proporciones se observan en otro tipo de infracciones.

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Según indican los resultados de la actividad de los agentes en 1999, el promedio de sanciones fue de 2,8 multas por guardia y día de trabajo.

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Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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