Diputación impulsó recalificar la sede de la Cámara de Comercio mientras se negociaba con Gorordo
La Diputación de Vizcaya impulsó el intento de cambiar el uso (de equipamiento a residencial) de la sede de la Cámara de Comercio de Bilbao, mientras ésta negociaba la indemnización con el líder de ICV, José María Gorordo. Pese a que la institución foral sólo posee una de las siete plantas del edificio, el director foral de Patrimonio realizó las gestiones ante el Ayuntamiento bilbaíno, lo que fue cuestionado por los técnicos municipales. El PP, que ha vinculado el frustrado intento de recalificación con el pago a 100 millones a Gorordo, considera "raras las coincidencias y hechos que han ocurrido".
El polémico pacto en el Ayuntamiento entre Gorordo y el PNV, cerrado hace casi un mes, sigue envuelto en dudas. El acuerdo político, que estuvo precedido por la exigencia de Gorordo de lograr una indemnización de cien millones por su despido hace cuatro años de su puesto de secretario-director de la Cámara, coincidió en el tiempo con las gestiones para recalificar el uso del edificio que acoge la sede de la entidad. Este organismo empezó a principios de 1999 a buscar un nuevo emplazamiento por las limitaciones actuales. En el edificio de Alameda de Recalde 50, de 7.500 metros cuadrados, ocupa cuatro plantas (otras dos son propiedad de RTVE y una de la Diputación), lo que le obliga a tener servicios en otros inmuebles.Los responsables de la Cámara de Comercio iniciaron las gestiones para hacerse con un solar adyacente, propiedad del Ayuntamiento, donde podía disponer de una aprovechamiento de 11.376 metros cuadrados y que está calificado urbanísticamente como equipamental. Sin embargo, la dirección de la Cámara, que en el pleno del 18 mayo de 1999 concluyó que "la opción más idónea es la construcción del nuevo edificio en la finca municipal colindante" y facultó a sus responsables a pujar por ella, no se percató hasta realizar estas gestiones de que el uso urbanístico del solar donde se levanta su sede actual es también de equipamiento. Su idea era financiar el coste de su futuro edificio con lo que se obtendría de la venta del actual para viviendas de lujo, dada su ubicación en una de las mejores zonas de Bilbao.
El propio director general, Juan Luis Laskurain, cualificado militante del PNV, asumió en otro pleno de la Cámara la responsabilidad del error, que fue calificado de inconcebible por algunos vocales, según testimonios recogidos por este diario. Ante este inconveniente, el siguiente paso era lograr la recalificación como uso residencial. Sin embargo las gestiones ante el Ayuntamiento no partieron de la Cámara, la principal interesada y que tenía la propiedad de la mayor parte del edificio, sino de la Diputación, que posee sólo una planta. El director foral de Patrimonio, Ángel Erkoreka, solicitó al consistorio el 21 de septiembre "una nueva modificación" del inmueble "ocupado parcialmente por la Diputación Foral, de forma que se sustraiga del sistema general de equipamiento y se permita en el inmueble el uso terciario-oficinas".
El responsable de la Diputación enmarcaba la solicitud dentro de su operación de traslado de sus principales edificios desperdigados en Bilbao a la torre proyectada en la zona de Abandoibarra, lo que le llevó en 1998 a pedir al Ayuntamiento su recalificación para poder así sufragar la operación. La sede de la Cámara no aparecía en la inicial relación de propiedades para la recalificación.
La solicitud foral fue aceptada por el subárea de Planeamiento del Ayuntamiento, pero expresando "ciertas dudas" porque "no se trata de un edificio de titularidad patrimonial de la Diputación", señala en su informe fechado el pasado 5 de octubre. El expediente de recalificación se llevó para su aprobación al pleno municipal del 25 de noviembre, pero imponiendo el posterior traslado de la Cámara de Comercio al solar colindante. Esta exigencia fue rebatida por el informe del secretario municipal. "Sería totalmente atípico una aprobación definitiva sometida a la condición del efectivo traslado". "Sería lo aceptable que el compromiso del traslado se adoptase antes de la aprobación provisional del expediente", decía.
Reunión con PSE y PP
No obstante, a la hora de garantizar que la recalificación fuese aprobada por el Ayuntamiento (el equipo de PNV-EA sólo tenía 9 de los 29 ediles) fue el director general de la Cámara quien trató de recabar los apoyos necesarios. Laskurain se reunió una semana antes del pleno con los portavoces del PP, Antonio Basagoiti, y del PSE, Dimas Sañudo, quienes le transmitieron su negativa a respaldar la recalificación. El tema no llegó a tratarse en el pleno, ya que, ante la imposibilidad de que saliera adelante, el edil de Urbanismo, Ibon Areso (PNV), retiró el expediente del orden del día. Areso ha explicado que la Diputación promovió las gestiones "porque era quien tenía la posibilidad de permuta con Abandoibarra. La Cámara nos tenía que haber ofrecido otro solar equipamental para concederle la recalificación"
Areso mostró la disposición de su partido a apoyar el cambio de uso, "que ahora está en suspenso", pero dijo que "es la Cámara la que se tiene que mover para lograr apoyos". Pese a los requerimientos de este diario, la Cámara no ha querido opinar sobre estos hechos.
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