El PSOE pide que los médicos vigilen el barrio previsto junto al vertedero

La portavoz adjunta del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Cristina Narbona, reclamó ayer que antes de que el pleno municipal apruebe adelantar cuatro años el desarrollo del nuevo ensanche de la ciudad por el sureste, cerca del vertedero de Valdemingómez, se lleve a cabo un estudio epidemiológico de la zona para prever enfermedades. El PP ha decidido acelerar un nuevo barrio en el área de Valdecarros, una zona que además linda con la incineradora y que albergará en el futuro más de 50.000 viviendas y cerca de 200.000 habitantes. En un principio, las licencias se iban a otorgar a partir de 2004, pero el pleno del próximo miércoles aprobará que esta fecha se reduzca a 2001. "Pediremos que el PP paralice este proyecto de Valdecarros hasta que haya un estudio médico oficial que determine si Valdemingómez va a dañar la salud de los futuros vecinos, ya que los límites establecidos por la Consejería de Medio Ambiente de impedir edificaciones a menos de dos kilómetros del vertedero o de la incineradora nos parecen claramente insuficientes", concluyó Narbona. "Las condiciones ambientales son agresivas y peligrosas para la salud, debido a la alta concentración de dioxinas y partículas en suspensión procedentes de la incineradora, los malos olores que vienen del vertedero y las plagas de insectos y ratas que hay en la zona", añade la concejal del PSOE.

El concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, salió ayer al paso de las críticas del PSOE. "La señora Narbona sabe perfectamente que ese estudio que reclama ya se está haciendo, porque es una cuestión que ya se ha debatido en varios plenos municipales", explicó.