La nueva Mesa Nacional de HB elegida en Pamplona incorpora a Gorka Martínez La asamblea convalida el rumbo de los últimos dos años y la alianza táctica con PNV y EA

Herri Batasuna eligió ayer su nueva Mesa Nacional, que tendrá carácter provisional hasta que los radicales concluyan su proceso de "refundación" en un movimiento más amplio, interferido por la ruptura de la tregua y retrasado al menos hasta otoño. Ocho de los 24 dirigentes elegidos provienen de la Mesa encarcelada en 1997 y entre ellos está Gorka Martínez, de nuevo en prisión acusado de ser parte del aparato internacional de ETA. La asamblea convalidó el rumbo de los últimos dos años y Arnaldo Otegi reafirmó la apuesta por la lucha institucional y la alianza "táctica" con el PNV y EA.

Los 400 miembros de la Asamblea Nacional de HB, reunidos en los cines Príncipe de Viana de Pamplona, aprobaron también la ponencia que guiará su acción política en busca de un Estado vasco independiente, socialista y vascoparlante. HB sacó adelante sin sorpresas los textos sometidos a debate desde septiembre, en los que se establece el mantenimiento de las alianzas tácticas forjadas con los restantes partidos nacionalistas. También se aboga por seguir combinando la "lucha popular" y el trabajo en las actuales institucionales de Euskadi y Navarra como método para configurar un nuevo marco político y jurídico que desemboque en la creación de un nuevo gobierno y parlamento nacionales vascos, que aglutinen a ambas comunidades y al País Vasco francés.La asamblea eligió a los integrantes de la nueva Mesa Nacional, que, con Arnaldo Otegi como portavoz y Joseba Permach como coordinador, dirigirá la formación hasta finales de este año. La nueva dirección retorna a sus 25 integrantes, frente a los 48 que han coexistido desde la salida de prisión en julio pasado de la Mesa Nacional encarcelada en diciembre de 1997. HB eligió a 24 de ellos, ya que el otro corresponde al partido Acción Nacionalista Vasca (ANV), integrado en la coalición radical.

Ocho de los dirigentes que han acompañado a Arnaldo Otegi en la andadura de los dos últimos años se han caído de la lista y fueron sustituidos ayer por los hombres fuertes de la dirección que fue condenada por colaboración con ETA. Entre ellos se encuentra Gorka Martínez, encarcelado de nuevo hace escasos días por orden del juez Baltasar Garzón, que le considera parte del aparato internacional de ETA. Para él fueron los mayores aplausos de la asamblea. Junto a Martinez vuelven a la dirección de HB Floren Aoiz, Rufi Etxebarria, Karmelo Landa, José María Olarra, Tasio Erkizia, Joseba Álvarez y Antton Morcillo, todos ellos significados dirigentes de la coalición durante su etapa más dura, que tenía la ponencia Oldartzen (Atacando) como guía de actuación. Ésta quedó ayer sustituida por la denominada Eraikitzen (Construyendo).

Responsabilidades

De ellos, dos vuelven con responsabilidades muy destacadas: el citado Gorka Martínez, designado para el área internacional, y Karmelo Landa, a quien se confía la política institucional. El resto de las áreas sectoriales, socioeconómica, comunicación y euskera y cultura, permanecen en las mismas manos que hasta ahora: Eusebio Lasa, Juan José Petrikorena y Ángel María Elkano. Entre los coordinadores provinciales, HB sólo ha relevado al de Álava, Xanti Hernando, sustituido por Antton Morcillo. El resto, Isabel Mandiola (Vizcaya), Jon Gorrotxategi (Guipúzcoa) y Juan Kruz Aldasoro (Navarra) continúan. Salvo Martínez, Landa y Morcillo, los otros cinco dirigentes recuperados de la antigua Mesa, incluido Rufi Etxebarria, que entregó el testigo a Arnaldo Otegi en diciembre de 1997 antes de ingresar en prisión, vuelven a la dirección sin cometido concreto. Miembros significativos de aquella ejecutiva que quedan fuera son Jon Idígoras, que animó ayer a persistir en la apuesta realizada; Juan María Olano, el hombre fuerte de las Gestoras Pro-Amnistía y dos históricos como Itziar Aizpurua y el empresario José Luis Elkoro.

La dirección la completan ocho personas elegidas por territorios: Kepa Gordejuela e Iñaki Olalde (Álava), Karmele Aierbe y Joseba Álvarez (Guipúzcoa), Shanti Kiroga y José Luis Moreno (Navarra) y Loren Arkotxa e Ibon Arbulu (Vizcaya).

La ponencia estratégica, a la que se presentaron más de 200 enmiendas que no cuestionaban los criterios oficiales, señala que la izquierda independentista vasca afronta ahora tres desafíos principales: la defensa de la cultura e identidad vascas al margen de planteamientos "xenófobos o jacobinos", la apuesta por el socialismo y la consecución de la paz con "la desaparición de todas las expresiones de violencia".

Otegi no quiso aclarar si la elegida ayer será la última Mesa Nacional de HB, ya que la coalición busca un cambio de estructuras y una configuración política más amplia siguiendo las pautas de Euskal Herritarrok, "una nueva unidad popular", en palabras de Otegi.