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Un hombre de 78 años, detenido en Girona por la muerte de su esposa

Cuando los bomberos entraron ayer en un domicilio de la calle de Riu Güell de Girona para sofocar las llamas que se extendían por el piso, encontraron en el suelo del comedor el cuerpo sin vida de Joaquima Casals, de 75 años de edad, con heridas de arma blanca en el cuello. Su esposo, Josep Sánchez, de 78 años, fue detenido como presunto autor de un homicidio que, según los primeros indicios, podría haber tratado de encubrir originando un incendio en la vivienda familiar.

Josep Sánchez permanecía detenido anoche en las dependencias de los Mossos d'Esquadra de Girona después de ser dado de alta en el hospital Josep Trueta, donde fue ingresado a causa de la inhalación de humo y de un choque nervioso. Las primeras hipótesis parecen indicar que el detenido apuñaló a su esposa y posteriormente prendió fuego al inmueble para borrar las huellas del crimen.El siniestro ocurrió hacia las 11.30, cuando los vecinos de la quinta planta del edificio percibieron una columna de humo que brotaba del primer piso. Los bomberos se presentaron en la casa en el momento en que Josep Sánchez pedía auxilio desde una de las ventanas, que da a un patio de luces, y gritaba que su mujer se encontraba en el interior de la casa.

Los bomberos sacaron a Josep Sánchez a través de la ventana y poco después echaron la puerta abajo para socorrer a la anciana. Pronto se dieron cuenta de que poco podían hacer por ella, puesto que presentaba una profunda herida incisa bajo la barbilla, posiblemente la causa de su muerte. Los bomberos aseguraron ayer que el incendio había sido provocado.

La mayoría de los vecinos de la vivienda siniestrada coincidieron en afirmar que no oyeron gritos ni discusión alguna. El vecindario no salía de su asombro ante la posibilidad de que la muerte de Joaquima Casals pudiera haberse originado a causa de un crimen conyugal. La pareja gozaba de buena reputación en el barrio y nadie tenía indicios de que se produjeran peleas o desavenencias. El juzgado número 4 de Girona decretó el secreto sumarial del caso.

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