Los "sumergidos" del mar: El buque "Global Mariner" abre al público sus bodegas para denunciar la explotación de miles de marinos

El hombre de la imagen es un marino a bordo de un barco de bandera de conveniencia. Lleva cinco meses sin cobrar y en el proceso ha perdido 18 kilos. No es un caso aislado; miles de marinos de todo el mundo están en parecida situación. Este y otros testimonios gráficos cuelgan de las bodegas del Global Mariner, un buque de carga que ha denunciado las penalidades laborales de este colectivo en los 80 puertos internacionales en los que ha fondeado. El pasado miércoles atracó en el puerto de Valencia, de donde zarpará el domingo rumbo a Londres, lugar del que salió en julio de 1998.La Federación Internacional de Trabajadores del Transporte, con 500 sindicatos asociados (entre ellos la UGT) y 650.000 marinos, ideó el proyecto dentro de su campaña contra las banderas de conveniencia, un sistema con el que algunos armadores consiguen eludir el pago de impuestos, el cumplimiento de las normas mínimas de seguridad y esquivar a los sindicatos. En la exposición, gratuita y abierta al público en el muelle de Poniente, imágenes espectaculares por su tamaño muestran hundimientos de barcos, camarotes insanos, viejos salvavidas y letrinas en un estado lamentable. "Hace 14 años que la ITF denuncia esta situación. De ahí la idea del barco", explicaba ayer José Luis Gimeno, de UGT. La ITF compró el Global Mariner (antes Lady Rebecca) a una empresa de Hong Kong por tres millones de dólares. Después se acondicionó y bajo bandera británica inició su singladura. Ayer, una hora antes del cierre, habían visitado la exposición 1.400 personas, sobre todo escolares. En las diferentes salas, además de las fotografías, ambientadas con sonidos e incluso olores, se han colocado ordenadores con juegos interactivos y se proyectan documentales sobre rescates y una película de dibujos animados para sensibilizar a los más pequeños sobre los sumergidos del mar.