_
_
_
_

Un alto cargo de Cultura, a favor de exhibir el bosquimano de Banyoles

El delegado de Cultura de la Generalitat en Girona, Joan Domènech, defendió ayer en una entrevista radiofónica la exhibición pública del guerrero bosquimano disecado del Museo Darder de Banyoles (Pla de l'Estany). Esta pieza museística ha estado durante años en el ojo del huracán de una desaforada polémica desde que el médico de origen haitiano Alphonse Arcelin inició una activa campaña de protestas que comportó la retirada del guerrero, que desde entonces se guarda en el almacén del museo.Domènech lo atribuye a la perseverancia de Arcelin. "Te duele, por aquel pundonor que tenemos todas las personas, que por la obsesión de un señor, que da la sensación de que es él quien está dolido por haber nacido negro porque no mide por el mismo rasero todas las cosas, se deba prescindir de esta pieza que es un exponente de una manera de pensar de otra época", argumentó.PASA A LA PÁGINA 6

Joan Domènech: "El negro no mejora ni resucita dejándolo enterrar"

VIENE DE LA PÁGINA 1 El delegado de cultura de la Generalitat en Girona, Joan Domènech, que especificó que hacía estas manifestaciones en la emisora de la cadena SER en Girona a título personal, se mostró asimismo contrario a la repatriación del guerrero bosquimano disecado, promovida por algunos Estados africanos. En tono irónico, Domènech aseguró: "No la mejoramos devolviéndola y dejándola enterrar; es decir, el negro no mejora ni resucita, evidentemente".

Aseguró también que, en su opinión, los políticos han entrado en un debate estéril sobre este asunto mientras quedan por abordar otros problemas mucho más importantes. "Más valdría que nos ocupáramos de los negros que lo pasan mal en estos momentos", dijo.

"Me duele que hagamos una cuestión política de una cosa que debería haber sido contemplada con toda naturalidad y desde un punto de vista cultural, con capacidad para discernir en cada caso y sin dejarnos engañar por cuestiones demagógicas, como es este caso", añadió Domènech.

El guerrero bosquimano disecado del Museo Darder, pese a que ya no puede ser contemplado por los visitantes, ha vuelto a generar polémica en Banyoles durante las últimas semanas por el intento de desencallar la situación auspiciado por el alcalde de la ciudad Pere Bosch, de Esquerra Republicana, que intenta, hasta ahora sin resultado,alcanzar el consenso con los demás partidos para repatriar el cuerpo disecado. Los republicanos siempre habían defendido la exposición pública del guerrero en el museo, pero cambiaron de opinión al llegar al gobierno municipal de Banyoles.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_