Encapuchados queman la estación de Portugalete y roban la recaudación

La actuación policial contra el aparato internacional de ETA fue respondida por los radicales causando incidentes en el País Vasco y Navarra. Así, un grupo de encapuchados quemó en la noche del sábado la estación de Renfe de Portugalete (Vizcaya) tras rociarla con un líquido inflamable, según la Ertzaintza (policía vasca). Los atacantes aprovecharon el sabotaje para llevarse las 80.000 pesetas que había en la caja registradora.El acto vandálico se produjo poco antes de las once de la noche, cuando cuatro individuos con sus rostros cubiertos, entraron en la oficina ferroviaria y, tras ordenar al encargado que la abandonara, echaron gasolina por toda ella. El fuego ocasionó daños en este local y en la máquina expendedora de billetes.

También hubo altercados en otras localidades. En Bilbao, grupos de manifestantes cruzaron contenedores en la parte vieja de la ciudad y les prendieron fuego. Tras apagar las llamas los bomberos, los ertzainas los retiraron para poder restablecer el tráfico rodado. Otro grupo de alborotadores lanzó un artefacto incendiario contra un cajero automático de una entidad bancaria en el barrio de Begoña.

Un desconocido lanzó otro cóctel molótov contra un repetidor de comunicaciones del Gobierno vasco situado en el monte Santa Bárbara, de Hernani (Guipúzcoa). El fuego causó daños en los cables.

Asimismo, desconocidos incendiaron de madrugada en Pamplona seis contenedores de basuras y un coche que estaba aparcado en sus inmediaciones resultó afectado por el fuego.

La Ertzaintza detuvo en San Sebastián a cinco manifestantes que se habían encaramado a un autobús urbano en el barrio de Herrera con pancartas en favor de los presos etarras. Los arrestos se produjeron, según fuentes policiales, al agredir aquéllos a los agentes que intentaron hacerles bajar del vehículo.