El PP decide no acudir a ningún acto festivo de la tamborrada

Los concejales del Partido Popular en el Ayuntamiento de San Sebastián anunciaron ayer la decisión de no participar en ninguno de los actos festivos que se celebrarán mañana en la Parte Vieja donostiarra con ocasión de la festividad de san Sebastián al "no estar garantizada" su seguridad física, afirmó la edil María José Usandizaga.Sorprende este pronunciamiento público en vísperas de la fiesta cuando en los últimos años tampoco asistió ningún cargo público del PP a los actos de la izada y la arriada de la bandera en la Plaza de la Constitución. Sin embargo, María José Usandizaga puntualizó que su partido "no busca protagonismo, ni victimismo" con esta medida.

Los concejales populares donostiarras, según Usandizaga, han recibido la recomendación de "no asistir a determinadas zonas de la ciudad porque no está garantizada nuestra seguridad física", en alusión a la Parte Vieja, donde este día se produce una masiva concentración de personas. No obstante, aseguró que sí estarán presentes en otros actos oficiales, como las entregas de las medallas al mérito ciudadano y del Tambor de Oro, por celebrarse dentro del edificio consistorial.

"Nuestra asistencia a la Parte Vieja podría producir cualquier altercado de orden público", afirmó Usandizaga, porque "es de todos conocida la situación que vive el País Vasco y la libertad que disfrutamos algunos ciudadanos".

El recuerdo de Ordóñez

Los ediles del PP aún tienen fresco en la memoria el recuerdo del asesinato de su compañero de partido Gregorio Ordóñez por parte de ETA, perpetrado el 23 de enero de 1995, después de un intento fallido tres días antes por la noche. Desde entonces, según el testimonio de un miembro de la corporación actual, los popualres evitan "acudir a los actos conflictivos" de la fiesta, especialmente a la izada, que es aprovechada por la izquierda abertzale para desplegar pancartas y lanzar mensajes reivindicativos.

A este respecto, la teniente de alcalde de San Sebastián, la popular María San Gil, reclamó ayer al Ayuntamiento que impida la colocación de pancartas políticas en la Plaza de la Constitución. Esta solicitud fue aceptada, aunque con reservas, puesto que "es muy difícil prometer que no va a haber ningún elemento reivindicativo en las fiestas".

El alcalde, Odón Elorza, trató esta cuestión con "prudencia", en aras de no incitar al agravamiento de la situación. "Solamente deseo que todos los ciudadanos participen activamente y con alegría en los actos, que deben estar presididos por el respeto y la cordialidad mutua", dijo.

Los concejales de Euskal Herritarrok, por su parte, proclamaron que la fiesta "debe ir unida a la reivindicación", por lo que aprovecharán los actos de la izada y la arriada -transmitidos en directo por ETB- para exigir el acercamiento de los presos de ETA a Euskadi.