La Generalitat destina 7.000 millones a construir el nuevo cremallera de Montserrat

La Generalitat prevé invertir más de 7.000 millones de pesetas para construir el nuevo tren cremallera de Montserrat, que se prevé que podrá entrar en servicio la primavera del 2002. En la reunión del Ejecutivo catalán celebrada ayer se autorizó a la empresa pública Ferrocarrils de la Generalitat a iniciar el proceso de contratación de las obras de construcción de la nueva vía del tren cremallera (3.543 millones de pesetas), que adjudicará la empresa pública GISA, así como a realizar la operación de compra de cinco unidades de tren con motor eléctrico, techo transparente y tracción mixta, de adherencia y de cremallera, para que puedan circular sobre cualquier tipo de vía. La compra, que se realizará a través de concurso público a convocar próximamente, tiene un presupuesto inicial de 3.132 millones de pesetas.

Con la aprobación del Cosell Executiu, el Gobierno catalán mantiene el último compromiso de poder adjudicar las obras antes del próximo verano y poderlas finalizar el 2002, para inaugurar el nuevo servicio el 27 de abril de aquel año, día de la Virgen de Montserrat. El tren cremallera de Montserrat, que tendrá unas características similares al del Núria (Ripollès), se presenta como una solución a los continuos problemas de acceso al monasterio en días de máxima afluencia de visitantes. El tren tendrá una frecuencia máxima de 15 minutos y una capacidad de transporte de 1.350 personas cada hora. La velocidad máxima en los tramos de ascenso será de 25 kilómetros a la hora y, en los de descenso, de 23.

El nuevo tren seguirá básicamente el trazado del anterior, que se inauguró en 1892 y que se cerró en 1957, cuatro años después de un trágico accidente. Desde 1982, la Generalitat ha venido estudiando diversas alternativas para solucionar el problema del acceso al parque natural de Montserrat y al monasterio.