La campaña de la renta del 2000 será en fechas diferentes en cada territorio. La Hacienda Foral de Guipúzcoa sustituye la ventanilla por el trato personalizado

La campaña de la renta de este año (correspondiente al ejercicio de 1999) se realizará en fechas diferentes en cada uno de los tres territorios históricos. Los ciudadanos vascos tendrán que enfrentarse esta primavera al nuevo Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, en vigor desde enero de 1999, y por primera vez las tres haciendas forales cuentan con una norma común. Sin embargo, los contribuyentes vascos no realizarán la declaración al mismo tiempo. Las vacaciones de Semana Santa y el Puente de San Prudencio, ambas en la segunda quincena de abril, han llevada a la Hacienda alavesa a retrasar el plazo para presentar la declaración de la renta hasta el 2 de mayo, cuando tradicionalmente se abría a mediados de abril. Esta decisión no la comparten los otros dos territorios históricos. Guipúzcoa tiene ya decidido comenzar su campaña el 3 de abril y Vizcaya, que aún no tiene cerrada la fecha, estudia como primera posibilidad iniciar también su plazo de declaración en la primera semana de abril.

El retraso de la campaña en Álava hará que el periodo de renta esté abierto hasta finales del mes de junio. En Guipúzcoa la campaña se cerrará el 25 de junio y en Vizcaya no hay una fecha determinada. Tradicionalmente no se han coordinado las fechas y este año pasará lo mismo. Cada territorio es soberano para establecer sus propios plazos.

La nueva norma del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas pondrá a prueba tanto a los contribuyentes como a la capacidad de gestión de las diputaciones. Los contribuyentes, ayudados por los medios técnicos de las tres haciendas o por los asesores fiscales, se enfrentarán en algunos caos a la necesidad de realizar hasta tres declaraciones para decidir cuál es la que más les conviene. A la habitual opción entre la declaración conjunta o individual, se suma la de aquellos ciudadanos que habían comprado vivienda antes de la aprobación de la nueva norma, que podrán optar por este sistema o por el anterior. Las haciendas, lo mismo que los contribuyentes, deberán contar con más variables tanto al realizar las declaraciones como en su posterior revisión.

Cinco millones

La nueva norma del IRPF establece también que todos aquellos contribuyentes con rendimientos de trabajo inferiores a cinco millones de pesetas no tienen la obligación de presentar declaración. Esta particularidad sólo se va a aplicar para la declaración de este años, ya que las tres haciendas han decidido rebajar ese límite hasta los tres millones de pesetas para la que se haga el 2001.

Las principales novedades para este ejercicio las realizará la Hacienda de Guipúzcoa, que sustituye la ventanilla atendida por auxiliares administrativos por el trato personalizado con cita previa atendido por técnicos de la Hacienda. Esta modalidad, que se puso a prueba con éxito el pasado ejercicio en las dependencias de Hernani y Tolosa, se va a extender al resto de los once centros con que cuenta la Hacienda de Guipúzcoa: tres en San Sebastián y el restos distribuidos por las distintas comarcas.

La idea es que los contribuyentes acudan a los técnicos con su documentación para que éstos, directamente, les realicen las declaraciones en sus distintas modalidades y les den en el momento el resultado de la autoliquidación. Guipúzcoa contará con 91 técnicos, de los que 64 se contratan en exclusiva para la campaña de renta. Además de éstos, cada oficina contará con un responsable del centro y un encargado de atender a los ciudadanos. La Hacienda de Guipúzcoa considera que los ciudadanos se sienten mejor sentados en una mesa que tratando con un funcionario detrás de una ventanilla de atención al público.

En Vizcaya se cree que la aplicación del sistema informático Rentanet, también con cita previa, facilitará la realización de las distintas declaraciones y no supondrá una gran dificultad para la hacienda. En todo caso, este territorio no tiene aún decididos los plazos para la declararación, pero sus responsables esperan tener preparada la campaña para comenzar a primeros de abril.

En Álava, la principal novedad es la declaración a domicilio. 2.000 contribuyentes seleccionados por la Hacienda alavesa recibirán en su casa la declaración ya elaborada. Éstos recibirán la liquidación de su impuesto a mediados de marzo y deberán llamar a la Hacienda para mostrar su conformidad o disconformidad con la declaración y, en su caso, realizar recibir el ingreso correspondiente.