El presidente del Gobierno arranca la precampaña electoral como líder del PP en Ceuta y Melilla
José María Aznar viaja mañana a Melilla y Ceuta, en calidad de líder del PP, para arrancar con sendos mítines la larga y reñida precampaña de las generales del 12 de marzo. Se ha diseñado el desplazamiento sólo con actos de partido para evitar a Aznar compromisos como presidente del Gobierno con ambas ciudades autónomas, que han vivido momentos muy conflictivos en los últimos años. La intención exclusivamente electoral de la visita ha sido muy criticada por los alcaldes de Ceuta y Melilla, a las que no ha acudido ningún jefe del Ejecutivo desde hace 19 años, aunque Aznar lo prometió en 1996.
En la Presidencia del Gobierno y en el PP se han cuidado al máximo todos los detalles para que la presencia de Aznar mañana en Ceuta y Melilla cubra el mayor número de objetivos políticos posibles con el menor coste.Aznar, que sigue siendo presidente del Gobierno y no ha disuelto siquiera las Cortes, actuará sin embargo sólo como candidato del PP. Viajará en vuelos de avión y helicóptero alquilados por su partido; participará sólo en actos políticos preparados por la formación conservadora, evitará saludar y conversar con las autoridades locales de ambas ciudades -el alcalde de Melilla, el musulmán Mustafá Aberchan, y el regidor de Ceuta, Antonio Sampietro, del GIL- pero cumplirá teóricamente el compromiso que suscribió en la precampaña de 1996 de volver como jefe del Ejecutivo.
Prometió entonces que viajaría de nuevo a estas ciudades fronterizas para realzar su vinculación y la de España con estas simbólicas plazas. Como aspirante a La Moncloa se permitía criticar las ausencias sistemáticas de Felipe González, que no fue nunca a Ceuta y Melilla como presidente del Gobierno.
Aznar llegó a rechazar un regalo (un pasador de corbata de oro) del entonces alcalde presidente de Melilla, el popular Ignacio Velázquez, porque quería recogerlo en su nueva función de presidente del Gobierno. El pasador de corbata le sigue esperando, pero en estos cuatro años han cambiado muchas cosas: Velázquez ya no es alcalde de Melilla, el PP ha perdido el control de esta ciudad y también de Ceuta en las últimas municipales tras un mandato tormentoso plagado de escándalos y mociones de censura, y tiene en serio riesgo la posibilidad de repetir sus habituales buenos resultados en las elecciones generales.
Dos escaños
En Ceuta y Melilla están en juego dos escaños, uno por ciudad. Hasta ahora eran patrimonio exclusivo del PP. El cálculo para lograr ese diputado se sitúa en alrededor de 10.000 papeletas. El GIL, el partido presidido por el alcalde de Marbella Jesús Gil, gobierna Ceuta y podría arrancarle al PP ese parlamentario. En Melilla, el GIL podría competir ahora en alianza con sus socios en el gobierno local, Coalición por Melilla de Aberchan y el Partido Independiente de Melilla (PIM). El PP irá con Unión del Pueblo Melillense y el PSOE en solitario.
El único presidente del Gobierno que viajó a Ceuta y Melilla fue el centrista Adolfo Suárez el 6 de diciembre de 1980. Las hemerotecas constatan que eludió los planteamientos patrióticos y demagógicos. Llegó, en plena transición, para garantizar la españolidad de ambas plazas. Y se enfrentó a tres grandes problemas: la descapitalización de ambas zonas; la cada vez mayor influencia marroquí y la falta de definición sobre un estatuto de autonomía. Los escollos, 19 años y un mes después, no son ahora muy distintos aunque ambas ciudades disponen hace tiempo de estatuto de autonomía propio y diferente al de Andalucía.
Los regidores de Melilla y Ceuta, Mustafá Aberchan y Antonio Sampietro, se mostraron ayer muy críticos con Aznar por evitar una visita oficial como presidente del Gobierno y por perseguir sólo "motivos electorales". Aberchan, que aseguró que iría a recibir a Aznar al aeropuerto, pidió por escrito al jefe del Ejecutivo que acepte ser cumplimentado "con los máximos honores" y acuda a una recepción en la sede de la Asamblea de Melilla para firmar en el libro oficial de autoridades. El acto ha sido convocado a la misma hora en que está previsto el inicio del mitin del PP en un polideportivo, informa Toñi Ramos.
Por el contrario, los responsables locales del PP ensalzaron el gesto de Aznar. Y el de Ceuta, Pedro Gordillo, remachó que así el presidente del Gobierno ratificará, casi 10 años después de su anterior visita como aspirante, su respaldo "a la españolidad" de esa ciudad.
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