Covaco limita la apertura de comercios a un máximo de ocho festivos que no sean domingo

La Confederación Valenciana del Comercio (Covaco), que agrupa a 40.000 establecimientos, reclamó ayer la aprobación este año de una nueva ley de Comercio que sustituya a la de 1986. Esta organización pide a la Generalitat que los festivos hábiles comercialmente no excedan los ochos días, que se exceptúen los domingos, y que se establezcan por ley y no por decreto como sucede ahora. Los responsables de Covaco, que estiman un aumento de ventas del pequeño comercio del 10% esta campaña, negocian un acuerdo con la industria autóctona para que cree redes de comercialización propias.

El pequeño comercio valenciano quiere una nueva ley de ordenación antes del 2001, año en que entrará en vigor la libertad horaria establecida por la legislación estatal. Covaco urge a la Generalitat a iniciar la tramitación de un nuevo texto y así evitar disputas de última hora entre los grandes operadores comerciales y los pequeños.Pedro Reig, presidente de Covaco, insistió ayer en la necesidad de disponer cuanto antes de una nueva norma. La confederación quiere que la futura ley limite la apertura de comercios a ocho festivos anuales, que de éstos se excluyan los domingos, y que el calendario se establezca por ley en lugar de por decreto como ocurre ahora. Rafael Lluch, secretario general de Covaco, considera ineludible además la regulación de nuevas fórmulas de venta no sedentarias (comercio electrónico, ventas por correo, etcétera). "Son sistemas que no recoge la ley de 1986 [actualmente en vigor] porque cuando se redactó su peso era anecdótico", apuntó Lluch.

El pequeño comercio reclama un articulado legal que impida la concentración de grandes empresas comerciales, a la vista de procesos de fusión como el reciente entre Pryca y Continente, que en la Comunidad facturan ellas solas cerca de 200.000 millones de pesetas anuales, según un informe de las cámaras de comercio. Según Lluch, esta ley debe limitar que una sola enseña comercial concentre más del 25% del mercado en consonancia con la recomendación del Tribunal de Defensa de la Competencia. También debe dotarse de un órgano consultivo estable, en el que estén representados todos los operadores, grandes y pequeños, y donde se debatan, por ejemplo, asuntos tan polémicos como la apertura en festivos.

Esta cuestión ha ocasionado en la última década auténticas batallas dialécticas entre la Generalitat, las grandes superficientes comerciales y los pequeños establecimientos. La guerra del pan ha sido la última.

Cambio de fechas

Los comerciantes de Valencia del sector de la alimentación han solicitado a la Generalitat un cambio del calendario de festivos pactado el pasado febrero para la presente campaña 1999/2000. Este sector, en el que se incluye el Mercado Central de Valencia, quiere abrir el sábado 22 de enero, festividad de San Vicente, al próximo domingo, día 9. La razón es obvia: la venta de alimentos en domingo es anecdótica en comparación con un sábado.

Covaco ha iniciado, por otro lado, conversaciones con industriales autóctonos con vistas a establecer cadenas de distribución propias o acuerdos con comercio valencianos ya existentes en los que vender sus productos directamente al público. "No puede ser que aquí [en la Comunidad Valenciana] tengamos grandes fabricantes de productos deportivos, por ejemplo, y que ninguno tenga tiendas propias o acuerdos con el comercio valenciano", explicó Lluch. "Es preciso un mayor entendimiento entre la industria y el comercio locales y en esta dirección trabajamos ahora", subrayó.

El último Salón de la Franquicia, que organiza cada año la Feria de Valencia, evidencia la falta de colaboración a la que se refiere Covaco, ya que el número de franquicias locales es testimonial en comparación con las de otras comunidades autónomas. La confederación confía en alcanzar un acuerdo marco en los próximos meses.

Covaco está por otro lado satisfecha con la campaña de ventas de Navidad y Reyes. Lluch calcula que las ventas crecerán un 10%. "Este año nos ha acompañado la climatología [ha hecho frío en los meses de otoño e invierno] y el comercio ha podido vender desde abrigos a estufas antes de las rebajas", explicó el secretario de la confederación. Las rebajas se prevén, en consecuencia, mejores que otros años con descuentos del 50% en los primeros días. En todo caso, también existen bastantes negocios, según Lluch, que han recurrido a ofertas especiales antes de la temporada de rebaja como fórmula de venta. "Esa es la tendencia a partir de ahora. La campaña tradicional de rebajas va a menos", comentó.