Muere uno de los irradiados en el accidente nuclear de Tokaimura

Uno de los tres trabajadores expuestos a altas dosis de radiación en el accidente nuclear ocurrido en Japón el pasado 30 de septiembre murió ayer. El incidente, el más grave en la historia de la energía nuclear civil nipona, ocurrió en la planta procesadora de uranio de Tokaimura, a unos 140 kilómetros al noreste de Tokio. La muerte de Hisashi Duchi, de 35 años, atribuida a un fallo múltiple en sus órganos, es la primera registrada en Japón por culpa de un accidente nuclear. Ouchi sufrió en el incidente una dosis de radiación de 17 sieverts, 17.000 veces superior a la que se recibe normalmente a lo largo de todo un año. Los expertos consideran letal la exposición radiactiva a partir de siete sieverts.

Otro de los trabajadores afectados, Yutaka Yokokawa, de 54 años, abandonó el lunes el centro de investigación radiactiva de Chiba, donde permanecía ingresado desde el accidente de Tokaimura. El tercer herido, Masato Shinoara, de 39 años, permanece hospitalizado sin que los médicos que le atienden sepan todavía cuando podrá recibir el alta médica, si es que ello es posible.

Los tres trabajadores sufrieron los daños tras colocar en un tanque de mezclas una cantidad de uranio condensado unas ocho veces superior a la adecuada, provocando con ello una reacción nuclear en cadena. El accidente fue considerado de nivel cuatro en una escala de riesgo del uno al siete (el accidente nuclear de Chernóbil alcanzó el nivel siete).

La radiación de Tokaimura afectó a un mínimo de 69 personas, según datos del Gobierno japonés, que ha sido duramente criticado por su deficiente supervisión de la industria nuclear en el país y su forma de eludir responsabilidades ante el accidente.

En respuesta a las críticas, el Gobierno nipón acordó la pasada semana en una sesión parlamentaria endurecer la seguridad nuclear.

La Agencia Internacional de Energía Atómica, organismo de Naciones Unidas encargado de la seguridad nuclear, propuso a Japón crear un comité de expertos internacionales para evaluar el accidente, sin que de momento haya obtenido respuesta.