El fiscal pide 163 años de cárcel para Ferrándiz y que cumpla toda la pena

El juicio contra Joaquín Ferrándiz, acusado de matar a cinco mujeres en Castellón, celebró ayer su penúltima sesión, en la que el fiscal del caso informó al tribunal de las peticiones de condena para el acusado. La Fiscalía pide 163 años de cárcel y más de 200 millones de pesetas de indemnización para las familias de las víctimas, con el Estado como responsable civil subsidiario. También exige que Ferrándiz cumpla la pena que le corresponda "íntegramente".

El fiscal Juan Salom solicita que se declare al Estado responsable civil subsidiario por no haber vigilado y controlado a Ferrándiz, que cometió los crímenes cuando estaba en libertad condicional tras cumplir una condena por agresión sexual. El fiscal subrayó ayer que de haber cumplido el Estado con la vigilancia y seguimiento de Ferrándiz, "se hubiera salvado a más de una de sus víctimas". Salom argumentó durante cerca de dos horas su petición de declarar al Estado responsable civil subsidiario de los delitos que se le imputan a Ferrándiz. El fiscal mantuvo que, en el caso de que el tribunal no lo considere de esta manera y sea necesario recurrir a la vía contencioso-administrativa, los familiares de las víctimas cobrarán "tarde y menos".Asimismo señaló, de forma reiterada, que el Estado no debe ser un privilegiado cuando los mecanismos de vigilancia al entonces en libertad condicional "no es que fallaran, sino que no existieron", por lo que los consideró como una mera "apariencia frente a la sociedad".

El fiscal sostuvo, además, que el procesado actuó en todos los casos con "alevosía", ya que sus víctimas no pudieron defenderse y fueron atacadas por sorpresa. También destacó que no cabe aplicarle ninguna atenuante, puesto que los peritos han declarado en el juicio que era consciente de sus actos criminales. Un psicólogo calificó al procesado de psicópata "muy grave" y un forense afirmó que sufre una enfermedad mental, un fuerte trastorno de la personalidad, pero ambos peritos dejaron claro que el acusado distingue entre el bien y el mal y es responsable de sus actos.

Por ello, el fiscal insistió en que Ferrándiz debe cumplir "íntegramente" la condena que le sea impuesta, aunque sea sometido a tratamiento médico. "Ya tuvo una segunda oportunidad", indicó refiriéndose a la libertad condicional que se le otorgó tras su primera condena, "y cometió cinco asesinatos". "No nos podemos permitir otro fracaso experimental", sentenció el fiscal. De los años de condena pedidos, Joaquín Ferrándiz cumpliría un máximo de 25.

En su informe, el fiscal señaló que la forma de actuar de Ferrándiz en los cinco asesinatos fue la misma. "Se ganó a sus víctimas con su cara, su aspecto beatífico, apacible y pacificador", indicó. El procesado se ofrecía a llevarlas a casa en coche tras sus salidas nocturnas, para después golpearlas, maniatarlas y estrangularlas. Tenía, ademas, una "notable habilidad para esconder los cadáveres". El propio Ferrándiz aportó detalles sobre su forma de actuar en las reconstrucciones de los casos que se hicieron tras su detención y confesión el año pasado. "Dio explicaciones que sólo podía dar el homicida", según el fiscal.

Respecto a las otras dos acusaciones que pesan sobre Ferrándiz, dos nuevos intentos de asesinato, el representante del ministerio público comentó que, como indicaron psicólogos y forenses, el procesado "empezaba un nuevo ciclo criminal" que se impidió con su detención en julio de 1998. Restan para finalizar este juicio, que ha durado ya nueve días, que acaben de exponer sus conclusiones las acusaciones particulares, en nombre de las familias de las víctimas, la defensa, que pide 10 años de prisión, y el abogado del Estado, que rechaza la pretensión del fiscal.