El PSE propone recortar la jornada lectiva del profesorado mayor de 55 años

El PSE ha presentado una propuesta al Departamento de Educación para reducir en un tercio la jornada lectiva de los profesores mayores de 55 años (1.357 docentes tienen esa edad o más) y mantener su sueldo íntegro. Según los socialistas, esta medida estimularía su trabajo. Además, según los cálculos del PSE, la iniciativa permitiría crear 450 nuevos puestos de trabajo, ya que por cada tres personas que redujeran su horario de clases haría falta un nuevo profesor para impartir las horas que dejaran de dar a los alumnos.

Educación ha tanteado tímidamente a los sindicatos sobre una iniciativa diferente que va en el mismo sentido: la posibilidad de conceder licencias retribuidas -que no abarcarían el 100% del sueldo- a estos profesores. La consejería se ha limitado a cuantificar cuántos docentes podrían acogerse a esta disposición, a qué nivel educativo pertenecen y cuál es su perfil lingüístico.La propuesta de los socialistas se diferencia del esbozo del Gobierno en que les garantiza el sueldo íntegro y les mantiene en su puesto hasta que cumplan la edad de jubilarse.

Ahora un docente de primaria o secundaria imparte una media de 18 horas de clase semanales, que completa con las horas que dedica a atender a padres, a actividades complementarias y extraescolares. Si fructifica la sugerencia del PSE, los maestros darían 12 horas de clase -la actividad que más desgasta y produce mayor tensión- y mantendrían el resto de su jornada inalterable.

La parlamentaria y responsable de temas educativos del PSE, Isabel Celaá, ha materializado la iniciativa a través de una enmienda parcial al anteproyecto de Presupuestos del Gobierno, que en breve iniciará su debate parlamentario. Según Celaá, los nuevos profesores podrían acceder al sistema a través de los contratos de relevo, que ya se han introducido en la enseñanza privada.

"El binomio incentivación-dedicación", apuntó la parlamentaria, "es la máxima por la que se debe regir el departamento a la hora de tratar los temas de personal". Celaá criticó que la consejería no haya hecho "nada" por incentivar al personal docente en los últimos años.

Aunque la propuesta del PSE va dirigida al conjunto del profesorado mayor de 55 años, existe un colectivo donde la iniciativa puede tener más receptividad: los docentes que son eximidos de su trabajo durante tres años para estudiar euskera en el programa oficial Irale. "Con 50 años cumplidos ponerte a estudiar euskera es muy duro. Si se reduce un tercio la jornada lectiva de estos docentes, ya no sería tan necesario el que supieran euskera para seguir dando clase", resaltó Celaá.

Entre 1.000 y 1.300 profesores son liberados cada año por el departamento para que asistan a los cursos del Irale y puedan presentarse posteriormente a los exámenes para acreditar el perfil lingüístico (PL 1, que supone un mínimo conocimiento del euskera, o el 2, que faculta para impartir clases de euskera o en euskera). Un 10% (152) de quienes se presentaron a estos exámenes en junio tenía más de 51 años y sólo 31% logró aprobar. Aunque los funcionarios están exentos de estudiar euskera a partir de los 45 años, los profesores de esa edad y mayores acuden al Irale ante el temor a que la plaza que ocupan sea suprimida porque se eleva la exigencia de conocer euskera.