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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Rigor e impunidad

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Su diario recoge una noticia, en su edición de Madrid, sobre la (desproporcionada) sanción de 1.000.005 pesetas a un jubilado por cazar ilegalmente dos jilgueros. Nos gustaría que su diario ofreciera también la auténtica realidad que existe en la Comunidad de Madrid en lo que se refiere a disciplina ambiental.La Consejería de Medio Am-biente de Madrid (CMADR) ha recibido de esta asociación, en los últimos años, un total de 29 actos de denuncia documentados, en su mayor parte acompañados de fotografías y datos que demostraban ilegalidades que se estaban produciendo en la zona del Jarama. En 23 casos no se ha abierto expediente informativo alguno. La CMADR ha incoado una única sanción, de 225.000 pesetas, y, por supuesto, se ha permitido que las actividades se desarrollaran sin ningún impedimento, incluso durante largos meses.

El resultado de este escenario está a la vista de cualquiera; los agresores habituales de la ribera del Jarama (conocidos de todos) han llegado a la conclusión de que cualquier agresión al medio natural no sólo queda impune (se les permite rematar la faena), sino que es notablemente rentable. Sólo dos ejemplos, entre los muchos que se podrían ofrecer: gravera pirata (Macoetra, SA) que, tras siete meses de extracciones de áridos, recibe la mencionada multa de 225.000 pesetas (otras cuatro actividades similares terminaron gratis total). Constructora Sánchez Primo, SA, elimina durante cinco meses sus escombros (750.000 metros cúbicos), anegando una laguna; no recibe ninguna sanción, pero en el precio de las viviendas se habrá añadido el costo por la eliminación de escombros en vertedero controlado. Podríamos seguir con una insultante relación similar protagonizada muchas veces por empresas de titularidad pública, Canal de Isabel II, que vierte lodos tóxicos y vertidos biológicos desde instalaciones hospitalarias al río Henares, etcétera. ¡Ah!, y todo esto sucede en el territorio (supuestamente) protegido del parque regional del Sureste. Los agresores al medio natural en nuestra Comunidad están tranquilos, saben que su noticia no refleja la realidad. La Consejería de Medio Ambiente es su principal aliado.- . .

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