La primera escuela pública sij de Europa abre en el Reino Unido
El Gobierno ha subvencionado cinco centros de minorías religiosas
Dos años de campaña popular y las correspondientes inspecciones del Ministerio de Educación han dado por fin el resultado perseguido por la comunidad sij del Reino Unido. Desde finales de noviembre, sus miembros cuentan con una escuela de primaria y secundaria financiada por el Estado. Las clases de esta religión sincrética, con elementos de la hindú y de la musulmana, son obligatorias, pero los alumnos cumplen también el programa nacional de estudios del sector público.
Presentada por el Gobierno como una forma de promover la diversidad cultural, según sus críticos este tipo de ayuda a centros de religiones minoritarias excluirá aún más de la sociedad a las minorías religiosas.En el Guru Nanak, nombre del centro recién abierto en el barrio de Hillingdon, al este de Londres, las cosas se ven de otro modo: la religión es obligatoria, cierto, pero sirve para formar buenos ciudadanos. "Nanak fue el primero de los 10 gurús de nuestra fe, que antepone la humildad al egoísmo y enseña a respetar al prójimo, en especial a todos los desfavorecidos. Una doctrina que obtiene buenos ciudadanos para una sociedad cada vez más plural", asegura con entusiasmo Rajinder Sandhu, director del área de secundaria. Según él, la escuela ha logrado acceder al sector estatal -en 1993 era privada pero muy pocas familias podían pagarla- gracias a los buenos resultados académicos obtenidos.
Alumnos notorios
"Aquí enseñamos punyabí, nuestra lengua, además de francés y otras religiones. Con un horario de ocho y media de la mañana a cuatro de la tarde, la jornada de estudio es algo más larga que en otros colegios. Un esfuerzo común que se nota en las calificaciones", sigue Sandhu. Tres de los alumnos más notorios del centro han ingresado en la Universidad de Oxford (leyes), el King"s College de Londres (bioquímica) y el Queen Mary"s College (medicina forense). Son ejemplos de lo que la dirección califica de estudiantes aplicados que recibieron apoyo por parte del profesorado.
Las asambleas diarias de alumnos, marcadas por la oración y dirigidas por ellos mismos, son el lugar para meditar acerca de los principios religiosos sij. Su libro sagrado es una compilación de textos de 36 autores, entre ellos los 10 gurús, y rige la educación espiritual. "Abrimos el libro y leemos una página cualquiera. El consejo que ofrece nos acompaña durante todo el día", subraya Sandhu. En su opinión, los que son críticos con el colegio se equivocan.
La religión sij promueve el respeto y la integración social. Escritoras como Yasmin Alibhai-Brown, por el contrario, sostienen que educar a los niños en centros donde sólo se relacionan con otros como ellos "diluirá el sentimiento de ser británico, que es lo único que acerca a todos los ciudadanos que viven en el Reino Unido sin perjuicio de raza o color". Rajinder Sandhu le replica que el colegio está abierto a todos y que entre sus alumnos hay niños hindúes y musulmanes.
Los sij son monoteístas y el hecho de que siempre construyan sus templos con cuatro puertas denota, precisamente, que desean estar abiertos a todo el mundo. El director del área de primaria del centro Guru Nanak es un cristiano británico. Rajinder Sandhu señala que el respeto a la fe y a la cultura ajenas es lo que trata de inculcarse a los niños bajo su tutela.
El apoyo recibido por parte de las autoridades locales para sumarse al sector estatal es otra de las bazas de Guru Nanak. A pesar de la tibieza con la que el anterior Gobierno conservador trató a las escuelas dirigidas por minorías religiosas, tanto sus diputados como los laboristas han respaldado al centro. La ilusión de Sandhu es ampliar el actual edificio, donde estudian ahora 340 niños y niñas para acoger hasta 600.
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