_
_
_
_

¿Podría un miope ser controlador aéreo?

Carmen Morán Breña

La Universidad Pablo de Olavide ha querido celebrar el Día de las Personas con Discapacidad dando la vuelta a la tortilla. Han demostrado que lo que hay que buscar son las capacidades de la gente y no las minusvalías. Para ello, un grupo de alumnos ha barrido el campus pidiendo a estudiantes, profesores y personal de administración y servicios, que indiquen alguna minusvalía que sufran. La encuesta, simbólica y sin valor científico, ha dado resultados a tener en cuenta. Vean: "La verdad es que mi altura, superior a lo normal, me ha supuesto bastantes complicaciones". "No puedo hacer nada sin mis gafas".

Estas son algunas respuestas de los que quisieron colaborar. Otros, más desabridos, se sintieron ofendidos con las preguntas y hubo quien, por toda respuesta, largo un "no quiero que me saquéis defectos".

Más información
El 75% de los discapacitados andaluces está en paro y más de 600.000 podrían desempeñar un trabajo

Lo que han demostrado con este juego es que el que más y el que menos tiene alguna merma en sus capacidades. Un miope no podría ser piloto; la mina no está hecha para los asmáticos; mala cosa para un obeso meterse a bombero; y qué decir de un alérgico que sea guarda forestal. Pero ¿acaso se considera a estas personas minusválidos?

¿Por qué, entonces, se trata como tal a otros, a efectos de inserción laboral? ¿Por qué no puede ser un cojo un perfecto administrativo? ¿O un ciego un buen telefonista? Seguro que hay otros ejemplos más interesantes y afortunados, pero, para muestra sirva un botón. Y eso es lo que han pretendido demostrar los alumnos y un grupo de profesores de Trabajo Social de esta Universidad.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Carmen Morán Breña
Trabaja en EL PAÍS desde 1997 donde ha sido jefa de sección en Sociedad, Nacional y Cultura. Ha tratado a fondo temas de educación, asuntos sociales e igualdad. Ahora se desempeña como reportera en México.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_