_
_
_
_

Un hombre desnudo hiere con un sable a 10 fieles en una iglesia de Londres

Un hombre desnudo atacó ayer con una espada a los feligreses de San Andrés, una iglesia católica del sur de Londres, causando 10 heridos, uno de ellos de gravedad. El incidente se produjo durante la misa de las 10 de la mañana, cuando el atacante, totalmente desnudo, irrumpió por la parte trasera de la iglesia y blandió su arma indiscriminadamente desde el pasillo central del recinto sagrado. El asaltante, un vecino del barrio, de 35 años, apuntó indiscriminadamente contra rostros y cuellos de las personas que encontró a su paso.El ataque pudo tener consecuencias aún peores de no ser por la reacción de un grupo de feligreses. Entre ellos, el policía Tom Tracey, que cantaba en el coro, rompió un tubo del órgano y se enfrentó al hombre desnudo. Con la ayuda de otros miembros de la congregación consiguió controlar finalmente al enloquecido asaltante que poco antes blandía su espada a diestro y siniestro.

"Ya no se está seguró en ninguno sitio", señaló visiblemente afectada Marie Parcou. Su marido, Jules, pensionista como la mayoría de los heridos, se recuperaba anoche en un hospital de Surrey, al sur de la capital, de cortes y laceraciones.

Entre los cuatro hombres y seis mujeres que cayeron víctimas de la brutal y sangrienta acción, un feligrés de 55 años continuaba ayer grave con cortes en la cara, en el cuello, y varios dedos amputados. Aún afectada por la tragedía, la congregación de San Andrés comparaba el suelo de la iglesia con un río de sangre y describía la escena como una carnicería. "Un herido tenía la mandíbula colgando de su cara", dijo un testigo.

La policía se reservó la identidad y motivos del asaltante, que ayer fue detenido en una comisaria local tras ser atendido de varias heridas. "Tengo miedo todavía. Si no fuera un devoto cristiano nunca más regresaría a la iglesia", confesó Carles Sousa, un empresario de la zona. El ataque con "una espada tipo samurai de unos tres metros", según un testigo, trajo a la memoria la brutal acción, hace tres años, de un individuo que cargó un machete contra niños de una escuela de Wolwerhampton, al norte del país.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_