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Un 'narco', abierto en canal para sacarle la droga que transportaba

Un bolero, narcotraficante que transporta bolas de cocaína, fue ayer hallado abierto en canal en la calle de Vara del Rey de Arganzuela. El cadáver, que fue arrojado a la acera desde un coche, había sido rajado de un extremo a otro para sacarle la droga que tenía en las entrañas, según la Jefatura Superior de Policía. El correo, posiblemente un suramericano, de unos 30 años, murió hace al menos dos días ahogado por una bola de 13 gramos de cocaína que el forense halló en su tráquea al hacer la autopsia.

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El cuerpo fue hallado por un vigilante jurado de la empresa Alcatel a las 5.30 en la calle de Vara del Rey (Arganzuela). El guarda aseguró a la policía que durante una de sus rondas nocturnas escuchó un golpe fuerte y a continuación un acelerón brusco.El vigilante sospechó que ocurría algo extraño y salió al exterior. En la confluencia de las calles de Ramírez de Prado y Vara del Rey vio un gran bulto. El trabajador se extrañó enseguida. Al aproximarse al gigantesco paquete, que estaba envuelto en una bolsa de plástico de color negro, sintió un fuerte hedor y alertó a los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía.

Una patrulla de la comisaría de Arganzuela llegó en primer lugar. Los agentes abrieron el paquete de plástico y descubrieron que se trataba del cadáver de un hombre joven que tenía el toráx rajado de un extremo a otro.

El cadáver estaba envuelto entre una cortina de baño de color rosa y un cubremantas. Luego estaba atado con varias cuerdas. Al lugar del hallazgo se trasladaron los agentes del grupo de Homicidios de la Brigada de la Policía Judicial. El cadáver se encontraba en posición fetal. El cuerpo tenía un gran corte en el abdomen con múltiples destrozos internos.

Corte horizontal

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Los encargados de recibir el envío de la droga le practicaron un corte vertical en el abdomen de unos 40 centímetros de longitud y de 20 centímetros de profundidad. La raja se extendía desde el esternón al ombligo, según informaron fuentes de la policía.La autopsia practicada ayer por la mañana desveló que el hombre murió asfixiado por una bola de 13 gramos envuelta en un condón, que se le quedó atravesada en la tráquea. Llevaba muerto entre 48 y 72 horas, según el dictamen del forense. La víctima no llevaba encima ningún tipo de documentación. Estaban vacíos los bolsillos de su pantalón vaquero gris y los de su camisa blanca. Iba descalzo. Por el color de su piel se presume que es un hombre nacido en un país suramericano y de unos 30 años. Según la descripcion física facilitada por la policía, tenía el pelo corto, medía 1,65 y pesaba unos 90 kilos.

"Nos da la impresión de que puede ser colombiano", dijo uno de los especialista del Grupo de Homicidios. "En su cara no hay ningún rasgo físico que llame la atención ni ninguna cicatriz, y tampoco llevaba pendiente", agregó.

Los agentes de la Policía Científica cotejaban ayer las huellas dactilares del bolero a la espera de identificar a la víctima.

La fotografía de su cara ha sido enviada a la Interpol y a varias policías suramericanas. El titular del Juzgado número 23 se encarga de las diligencias del caso.

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