La Generalitat ofrece a Alsina Graells la explotación del tren de La Pobla

La Dirección General de Transportes de la Generalitat ha ofrecido a la empresa Alsina Graells la posibilidad de participar en la sociedad mixta que gestionará y explotará el tren que cubre el trayecto entre Lleida y La Pobla de Segur cuando el Gobierno central traspase esa línea férrea a la Administración autonómica. El tren de La Pobla, amenazado tantas veces de cierre a causa de las pérdidas económicas, tiene la continuidad asegurada porque el Ministerio de Fomento ha licitado la primera fase de las obras de mejora de la línea.

La primera fase de obras comprende la mejora de la vía entre las poblaciones de Lleida y Balaguer, y está licitada por un importe de 1.830 millones de pesetas. Las obras comprenden la renovación de las vías; la construcción de seis nuevos apeaderos en su trayecto; la reforma de las estaciones de Balaguer, Tremp y La Pobla; la supresión de 16 pasos a nivel, y la rehabilitación de cinco puentes.

A pesar de que Renfe estuvo a punto de clausurar en 1984 esta línea deficitaria, el servicio diario de viajeros entre Lleida y La Pobla ha podido mantenerse gracias a un convenio tripartito entre la Diputación de Lleida, la Generalitat y la empresa ferroviaria de titularidad pública.

Las dos instituciones catalanas aportan anualmente a partes iguales alrededor de 200 millones de pesetas para sufragar las pérdidas.

En 1994, el Congreso de los Diputados instó al Gobierno a traspasar la titularidad y gestión de la línea de La Pobla a la Generalitat, pero desde entonces las partes afectadas no se han puesto de acuerdo acerca de las condiciones económicas en que debe realizarse la transferencia.

Un déficit histórico

La Generalitat exige para asumir el tren una inversión millonaria para modernizar una línea que se halla en tan malas condiciones que los convoyes no pueden circular a más de 40 kilómetros por hora en la mayor parte de su recorrido por la vía férrea.

La licitación de las obras de mejora de esta línea, de 89 kilómetros de recorrido, supone el primer paso para materializar el traspaso y recuperar un servicio que en los últimos años había perdido muchos usuarios. Una vez resuelta la cuestión de la inversión estatal, la Generalitat deberá estudiar una fórmula para su gestión, que, según fuentes consultadas, se hará al estilo del sector privado.

El director general de Transportes, Enric Ticó, ha anunciado que la empresa Alsina Graells, que tiene una amplia flota de autobuses regulares en Cataluña, podría participar en la sociedad mixta que gestionará la línea junto con la empresa pública Ferrocarrils de la Generalitat.

Según Enric Ticó, Alsina Graells es un operador con prestigio en Cataluña y garantiza un servicio de calidad. Ticó señaló que la participación también está abierta a otras empresas del sector de transporte de viajeros por carretera.

La intención de la Generalitat, una vez asumida la gestión del tren de La Pobla, es convertir el tramo entre Lleida y Balaguer en un metro