Heridas abiertas

El diseño del paseo del Prado propuesto por los 12 proyectos arquitectónicos no ha gustado a los grupos de la oposición presentes en el jurado. "Los proyectos nos parecen bastante malos y nada útiles. No veo el interés de meter peatones cargándose los árboles y sin buscar soluciones circulatorias. Lo que hemos visto para una zona de museos como ésta es muy cortito, muy limitado", afirma Matilde Fernández, portavoz de urbanismo del PSOE-Progresistas. La edil se muestra especialmente crítica con las propuestas sobre los aspectos ornamentales del paseo, como la reubicación de las fuentes diseñadas cuando Carlos III convirtió el paseo del Prado en la enseña urbanística de su reinado.

"Lo de mover las fuentes es como romper una parte de la historia de Madrid. Esas propuestas son auténticas heridas para la ciudad", resalta Matilde Fernández.

Para Justo Calcerrada, de Izquierda Unida, los proyectos "no resuelven nada". "Está claro que no han buscado dar espacio a los peatones. Las bases están tan condicionadas que han provocado unos proyectos donde se atrae más el tráfico particular", señaló Calcerrada.

Cuatro de estos proyectos no tienen previsto en la superficie espacio para los carriles-bus. Y otros tres no resuelven bien los puntos donde coinciden los coches con los peatones. Son "zonas conflictivas entre el tráfico rodado y los caminantes", según señala el informe. En otra propuesta concluye: "No se ha previsto en superficie el giro desde el paseo de Recoletos a la calle Alcalá".