El acuerdo entre CiU y el PP indigna a los dirigentes de Esquerra Republicana

VIENE DE LA PÁGINA 1 La indignación de los dirigentes de ERC con CiU no supuso un acercamiento inmediato a los socialistas, a pesar de que el portavoz del PSC, Joaquim Nadal, y el de ERC, Josep Huguet, llegaron a primera hora de la tarde a un preacuerdo para coordinarse en la votación de hoy sobre la Mesa del Parlament. No obstante, el pacto se rompió unos minutos después, cuando se sumaron al encuentro Carod y Pasqual Maragall con la intención de refrendarlo.

Fuentes de Esquerra explicaron que Maragall exigió el voto de los independentistas para su candidato a la presidencia de la Cámara, Josep Maria Vallès. Los independentistas mostraron exclusivamente predisposición a apoyar al socialista Higini Clotas como vicepresidente segundo a cambio de una secretaría en la mesa, en consonancia con lo pactado por Huguet y Nadal minutos antes. Ante la petición de Maragall de apoyar también a Vallès, los republicanos abandonaron la reunión y presentaron el gesto como muestra de que se mantienen firmes en su equidistancia.

Pacto de gobierno

A pesar de pactar con el PP la composición de la mesa, CiU se esforzó en subrayar que sigue apostando por un acuerdo con Esquerra Republicana. Lo de ayer, según CiU, tan sólo significa un reparto de cargos de la Mesa del Parlament proporcional al resultado de las elecciones autonómicas.

En una nota hecha pública anoche, la coalición nacionalista reafirma su disposición a llegar a un pacto de gobierno con ERC, a la que culpa del fracaso de las negociaciones. Fuentes nacionalistas aseguraron ayer que la coalición quiere iniciar otra ronda de encuentros después de la investidura o tras la celebración de las elecciones generales de la próxima primavera, cuando se clarifique el panorama político español.

ERC considera que la nueva propuesta de CiU es pura propaganda. "Lo único cierto es que Convergència da prioridad de manera descarada al Partido Popular", afirmó Carod. Los socialistas, por su parte, creen que se trata de una nueva "operación de maquillaje" para tratar de ocultar que Pujol sustentará su precaria mayoría con el apoyo exclusivo del PP. "No es un acuerdo institucional, sino un acuerdo entre dos partidos", señaló Joaquim Nadal.

Los nacionalistas de Pujol propusieron ayer al resto de los partidos políticos el siguiente reparto de las secretarías de la mesa: CiU la segunda y la cuarta, ERC la primera y el PSC la tercera, con lo que el grupo de IC-V sería el único sin representación salvo que un acuerdo de última hora entre los grupos logre evitarlo.

Este reparto es, para CiU, lo que estipula el reglamento del Parlament y es proporcional a los resultados de las elecciones. Si se hiciera por la aritmética parlamentaria, los nacionalistas podrían obtener no sólo la presidencia, sino también la vicepresidencia primera y las secretarías primera y tercera.

El PP celebró anoche un comité ejecutivo extraordinario para ratificar el acuerdo, al que asistieron una treintena de dirigentes. De los cuatro miembros del PP catalán que forman parte de la ejecutiva nacional del partido sólo acudió el presidente regional, Alberto Fernández Díaz. No estuvieron, por tanto, ni Josep Piqué, ni Santiago Fisas, ni Alejo Vidal-Quadras.

Jugador de póquer

Varios de los asistentes a la reunión coincidieron en señalar que la reunión fue de puro trámite y duró apenas media hora. Fernández Díaz dio cuenta de las reuniones celebradas con la delegación de Convergència i Unió e insistió en su tesis de que el acuerdo de ayer no prefigura el apoyo a la investidura de Pujol.

Las mismas fuentes explicaron que todas las intervenciones fueron elogiosas hacia la "brillante" forma en que Alberto Fernández y su secretario general, Rafael Luna, habían llevado las negociaciones. El más entusiasta fue, según varios de los asistentes, el delegado del Gobierno en la Zona Franca, Enrique Lacalle, colaborador de Alberto Fernández, quien le dijo: "Has demostrado, Alberto, que eres un gran jugador de póquer".

Antes que la ejecutiva se reunió también el grupo parlamentario popular. Los diputados supieron que Fernández Díaz había nombrado portavoz a la número dos de su lista por Barcelona, Dolors Nadal, y había aplazado cualquier otra designación.

El PP y ERC esperaron hasta ayer para definir la organización interna de sus grupos parlamentarios, a la espera de conocer qué puesto ocuparían en la mesa. ERC también reunió a su grupo, del que finalmente será portavoz Josep Huguet. Como portavoz adjunto, Carod ha designado al número dos por Tarragona, Josep Bargalló, y el representante en la mesa, en caso de que finalmente ERC esté representada, será Ernest Benach. Todos ellos, al igual que el propio Carod, militaron en en el Partit Socialista d"Alliberament Nacional o Nacionalistes d"Esquerra.