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Entrevista:

"Me preocupa cómo están redactados los estados de excepción"

Juan Jesús Aznárez

ENVIADO ESPECIAL"Me preocupan los estados de excepción tal como están redactados en el anteproyecto", admite Hermann Escarrá, presidente de la Comisión Constitucional de la Asamblea Constituyente, que redacta la Carta Magna encargada de facilitar la revolución democrática prometida por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez. "Responden a un esquema antiguo y autoritario y chocan contra el desarrollo democrático de la Constitución. Esperamos superarlo". Escarrá, de 47 años, integra el flanco moderado de la coalición gubernamental Polo Patriótico. De perfil democristiano, rechaza el aborto, y el adjetivo "veraz" agregado al derecho a la libertad de información en el artículo 60.

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Venezuela tendrá un Consejo de Estado parecido al español a iniciativa de Hermann Escarrá, catedrático de Derecho Constitucional en la Universidad Católica Andrés Bello de Caracas, en la que imparte la docencia desde hace 20 años. Ha escrito 32 libros o ensayos sobre temas constitucionales y ejerce una de las funciones clave en la Constituyente: el ordenamiento normativo de la Constitución. Venezuela, señala en una entrevista con EL PAÍS, se dirige hacia un "parlamentarismo moderado" y un "semipresidencialismo". Entre otras innovaciones, la nueva ley fundamental consagra el federalismo, y los referendos para revocar mandatos, desde el presidente de la República a funcionarios o alcaldes.

Pregunta.Usted dijo que Venezuela podía llegar a ser recordado como el país que tiene una Constitución de 1.300 a 1.500 artículos. ¿Ha pasado el peligro?

Respuesta.Estoy más tranquilo. Se redujeron a 395 y podemos hacer una reducción todavía mayor.

P.La Constituyente pretende aprobar casi 300 artículos y disposiciones transitorias en apenas dos semanas. ¿No es demasiado precipitado?

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R.Legalmente tenemos un lapso de seis meses, que termina el 3 de febrero. Y hay 30 días de reflexión de la nación, que son intocables e intangibles, para que pueda libremente votar en el referéndum del 15 de diciembre.

P.Las prisas pueden devaluar el contenido constitucional.

R.Debemos acelerar un poco la marcha de los debates pero sin devaluar el contenido del anteproyecto y manteniendo la participación.

P.Pero insisto ¿es posible aprobar 300 artículos en dos semanas?

R.Sí es posible porque ya tenemos aprobados tres títulos. Lo que ocurre es que nos hemos detenido mucho en el capítulo último, el de los derechos sociales, porque era el que resumía la mayor parte de los conflictos: la libertad de culto, el derecho a la vida, la información veraz, las prestaciones sociales de los trabajadores. Pero ya hemos salido de eso. El resto ya es el régimen político que, como usted sabe, se aprueba en bloque, que es lo que se llama modernamente el bloque de constitucionalidad del régimen político.

P.Queda por discutir un tema fundamental, el económico.

R.Para mí, el tema central es el de la institucionalidad porque la parte económica en todas las constituciones son principios generales, unos derechos económicos básicos. Ninguna constitución entra en restricciones, como se ha pretendido hacer aquí.

P.¿Qué se ha salvado hasta ahora en el anteproyecto?

R.La democracia, el Estado federal, el Estado descentralizado, que era un clamor en Venezuela. Vamos a algunos debates que son difíciles. Hay que salvar la concepción bicameral [del Congreso] y fortalecer al Senado como manera de expresión territorial. También debe salvarse la idea de un sistema semipresidencial, que desconcentra la función de gobierno en un vicepresidente que a su vez puede ser también objeto de un voto de censura por parte de la Asamblea o de quien al final ejerza la función legislativa. A la vez el presidente tiene facultades de disolución. Se trata de un parlamentarismo moderado y de un semipresidencialismo que es la forma mixta que ha logrado mayor consenso entre los 131 constituyentes.

P.¿Qué novedades destacaría respecto a la Constitución de 1961?

R.Muchísimos aspectos. Hay uno en el que yo tengo que ver directamente. Queremos crear un Consejo de Estado de carácter preceptivo constitucional, de asesoramiento del gobierno, no anulatorio como el Consejo de Estado francés, sino más bien en la forma que tiene el Consejo de Estado español. Creo que ésta es una gran innovación junto a la conformación del Estado federal y el desarrollo de los poderes públicos en cada uno de los ámbitos. Es también una novedad para nosotros el sistema de democracia participativa a través de los cuatro referendos.

P.El anteproyecto abre el camino al aborto.

R.Es un tema bastante delicado. Yo, en lo personal, no comparto esa tesis. No me gustaría que nuestra Constitución fuera abortista.

P.¿El derecho a la información "veraz" abre el paso al censor?

R.Se está haciendo un esfuerzo para regresar solamente al enunciado de la libertad de información.

P.¿Cuál es su criterio particular?

R.No apellidar a la libertad de información. Ustedes en la Constitución española tienen la libertad de información y hablan de información veraz, pero tienen sistemas de control, tienen al juez Garzón y tienen un poder judicial que actúa. En cambio nosotros no tenemos eso, lamentablemente. Y duele decirlo. Nuestro poder judicial ha estado de espaldas a la realidad, corrompido, debilitado, muy deslegitimado.

P.El tema militar es polémico en parte porque el presidente, Hugo Chávez, es teniente coronel y encabezó una rebelión. ¿Cómo quedan los militares en la Constitución?

R.Hay varios temas que, efectivamente, son polémicos. Uno se resolvió, que es relativo al carácter deliberante de las Fuerzas Armadas. Al final se entendió que no podían tener ese carácter dada la situación de profesionalismo de nuestras Fuerzas Armadas, de órgano colegiado y jerárquico.

P.Hay quienes piensan que la nueva Constitución limitará la democracia. ¿La constriñe algún artículo?

R.Siéndole muy honesto, hasta ahora no lo hay. Tengo sí preocupación con los estados de excepción, que están muy mal desarrollados y responden a un esquema muy antiguo, muy arcaico, muy autoritario que choca con el desarrollo democrático de la Constitución. Todo eso esperamos superarlo.

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