CC OO y UGT exigen que se regule la jornada continua con una ley regional
Los sindicatos Comisiones Obreras y UGT pidieron ayer en un comunicado conjunto una normativa autonómica que regule el acceso a la jornada continua para los alumnos de primaria en la Comunidad de Madrid. Ambos sindicatos consideran que el sistema arbitrado en cursos anteriores por el Ministerio de Educación no es válido, tanto por los requisitos que establece como por el modo en que se expuso, ya que se hizo sin el respaldo de una orden ministerial.La ex ministra de Educación Esperanza Aguirre ofreció a los colegios la posibilidad de tener la jornada continua si cumplían una serie de requisitos. Los principales: conseguir el apoyo del 80% de los padres, mantener los servicios de comedor y redactar un proyecto educativo.
"La jornada escolar es un aspecto fundamental de la programación general del sistema educativo, responsabilidad de los poderes públicos. Apostar por la desregulación, de tal suerte que el modelo de jornada se decida centro a centro con el único requisito del apoyo de la mayoría de los padres, puede hacer inviable la planificación de la enseñanza pública en un momento de fuerte competencia con los centros privados", explicaba el comunicado.
El secretario regional de enseñanza de UGT, José Mata, señaló que pedir como requisito el apoyo del 80% de los padres del censo (no de los que acudan a votar o contesten al sondeo) le parece exagerado. El secretario regional de CCOO, Jaime Cedrún, aseguró que el "método Aguirre" no da una seguridad jurídica a los que pretenden acceder a un tipo de jornada diferente a la establecida en la orden ministerial de 1996, que fija dos turnos de mañana y tarde separados por dos horas.
La normativa debería regular también, según ambos sindicatos, el horario de los centros después de las clases para acoger actividades extraescolares o de otro tipo, su financiación por parte de la Administración pública y el papel de los ayuntamientos en ese tiempo extra. Por otra parte, insistieron en que el debate sobre la jornada de los alumnos debe separarse de la negociación del horario intensivo de los profesores.
