Un plan para el Júcar prevendrá las avenidas del río durante 100 años

Las actuaciones incluidas en el plan globalfrente a inundaciones en la Ribera del Júcar, presentado ayer en Sueca por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ante concejales y alcaldes de la comarca y organizaciones agrarias y ecologistas, tiene como objetivo conseguir unos umbrales de protección estructural que se fijan entre 100 y 250 años para zonas urbanas y entre 25 y 50 años para las agrícolas.

El plan elaborado por el CHJ en colaboración con el Centro de Estudios Hidrográficos del Cedex identifica las poblaciones y áreas agrícolas deficitarias en protección frente a las avenidas de los ríos y cita sobretodo a los núcleos urbanos de Alzira, Carcaixent, Polinyà, Càrcer y Cotes junto a los valles del río Verde y del barranco Barxeta. Las principales actuaciones estructurales previstas son las presas de Estubeny en el río Sellent, la de Montesa en el río Cànyoles y la del Marquesado en el río Magro, afluentes todos ellos del Júcar.

Las tres presas de laminación controlarán el 48% de la cuenca vertiente del Júcar actualmente no controlada, tras la puesta en marcha de las de Tous, Escalona y Bellús. El Sellent es uno de los afluentes que más caudal aporta al Júcar y con la construcción de su presa se conseguirá la protección de las poblaciones de Càrcer y Cotes al controlar 246 kilómetros cuadrados, lo que supone "la casi totalidad de dicho río". Y si los embalses de laminación citados sirven para reducir los caudales punta, las canalizaciones contempladas en el plan reducirán los niveles de inundación.

Corredores "verdes"

Como medidas complementarias de defensa propone el estudio de posibles corredores verdes en el barranco del Duch y el río Verde junto a la defensa, mediante motas, de las localidades de Alberic, Benimuslem y Polinyà de Xúquer. No falta tampoco un programa de restauración hidrológico-forestal de la cuenca, otro de mejora de drenaje de las vías de comunicación y entre las actuaciones no estructurales cabe citar la cartografía de riesgo, protección civil, la ordenación del territorio y una campaña de promoción y divulgación del seguro agrario.

El plan señala que el área inundable Júcar-Albufera es la segunda de la Comunidad en impacto potencial tras la del Segura al afectar a una población de 200.000 habitantes. Y advierte de que los suelos urbanizables previstos en los 27 municipios situados en zonas inundables son "preocupantes" al situar en áreas de riesgo el 24% del total del suelo que contempla su planeamiento urbano.

Según la CHJ los estudios de viabilidad y trabajos complementarios deberán estar finalizados en el año 2001, para iniciar las actuaciones en el 2002 y estar totalmente ejecutado el plan durante el 2005. El presidente de la mancomunidad de municipios de la Ribera Alta, Francesc Signes, calificó ayer el documento de "riguroso y exhaustivo".