Deducciones fiscales y más inversión

El candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, Pasqual Maragall, plantea en su programa económico congelar la presión fiscal de los tributos que gestiona el Gobierno catalán, reducir los gastos administrativos, crear deducciones fiscales para jóvenes, personas mayores y empresas, y duplicar la inversión de la Generalitat.El programa del PSC plantea un ahorro en los gastos administrativos de la Generalitat para poder destinar fondos a nuevos gastos sociales y aumentar la inversión. "Se han hecho cosas en los últimos 20 años, pero se han hecho de una manera que no son sostenibles", indica el programa económico del PSC. "Los gastos administrativos de la Generalitat [que incluyen los salarios del personal y la compra de bienes y servicios] superaron los 75.000 millones de pesetas en 1998, lo que supone que, tras Canarias, Cataluña tiene los gastos corrientes por habitante más elevados", señala el programa.

El objetivo del PSC es limitar el crecimiento del gasto al 3% anual a lo largo de los próximos cuatro años. La mitad de este crecimiento correspondería a los actuales gastos y la otra mitad iría destinada a la implantación de nuevos servicios. El programa socialista estima que de esta forma se dispondría de más de 108.000 millones de pesetas en el año 2003 y de 250.000 en los próximos cuatro años para acometer nuevos gastos. En concreto, el programa del PSC plantea el objetivo de que en el año 2003 se puedan destinar "25.000 millones adicionales a mejorar la sanidad, 15.000 millones a servicios sociales, 50.000 a mejorar la enseñanza y 10.000 a financiar a los ayuntamientos".

Inversión

El programa señala que gracias al control del gasto público y a un crecimiento económico del 3,5% medio anual entre el año 2000 y el 2003, las inversiones podrán duplicarse al final del cuatro años. El objetivo es pasar de una inversión de la Generalitat de 261.706 millones de pesetas presupuestados este año a 286.347 millones para el año próximo y llegar al año 2003 a 501.983 millones. Los socialistas dicen que "el esfuerzo inversor se ha reducido en 60.000 millones de pesetas en el periodo 1995-1998" respecto a los cuatro años anteriores. En total, el PSC plantea invertir 1,556 billones de pesetas en la próxima legislatura frente "a 900.000 millones" invertidos en los últimos cuatro años.

Medidas fiscales

El programa incluye medidas fiscales sobre el IRPF, el IVA -aún no gestionado por la Generalitat- y el impuesto de actos jurídicos, que grava la constitución de empresas. Pasqual Maragall propone que los tributos que gestiona la Generalitat no crezcan más que la economía para, de esta forma, congelar la presión fiscal. Se trata de los impuestos de sucesiones, transmisiones patrimoniales, patrimonio y actos jurídicos.

Las principales propuestas fiscales son: elevar la deducción en el IRPF por nacimiento de hijos desde 25.000 a 50.000 pesetas; crear una deducción para la compra de vivienda en el IRPF para jóvenes menores de 30 años y del 3% como ayuda a la juventud y la familia. Se plantea una deducción de 10.000 pesetas en este impuesto para los mayores de 65 años en situación económica precaria, siempre que sus ingresos no superen el doble del salario mínimo interprofesional [69.270 pesetas al mes]. Creación en el impuesto de transmisiones patrimoniales de una escala reducida de tipos impositivos por la compra de vivienda usada. La escala irá del 6% al 7%. Para las empresas, se plantea una bonificacion del 95% en el impuesto de actos jurídicos.

En relación con el IVA -un impuesto sobre el que la Generalitat no tiene competencias-, el PSC plantea reducirlo para las compras del sector sanitario y en el consumo de agua.

Reducir el endeudamiento

El programa económico socialista señala que con el actual presupuesto de la Generalitat, que suma dos billones de pesetas, "casi el 13% del PIB catalán (...), se dispone de un instrumento potente para impulsar la economia".

El programa incluye el objetivo de detener el incremento del endeudamiento. Este objetivo,que también ha sido planteado por el Gobierno presidido por Jordi Pujol, deriva del imperativo que impone el Tratado de Maastricht para mejorar la situación de las finanzas públicas. Los socialistas plantean que la deuda aumente en 10.000 millones de pesetas el año próximo, un propósito similar al que expone CiU.

El PSC señala que el endeudamiento de la Generalitat, "incluyendo empresas y fórmulas atípicas, ha pasado de 1,1 billones a finales de 1994 a 2 billones de pesetas al acabar 1998". Los socialistas critican al Gobierno catalán por el manejo de la deuda. "En 1998 afloraron facturas no contabilizadas en sanidad, correspondientes a 1997, que superaban los 122.000 millones de pesetas".

Los socialistas afirman que, aunque "el déficit se ha reducido en los últimos años, la deuda ha alcanzado niveles muy elevados en poco tiempo. Adicionalmente, parte del ajuste presupuestario se ha hecho gracias al recorte de los tipos de interés. Estos factores no se podrán repetir en la próxima legislatura", agrega el documento.

Empresas y territorio

El PSC señala que Cataluña pierde "peso económico; este proceso se tiene que parar. En los años setenta", añade el documento, "una de cada tres de las 250 grandes empresas españolas tenía su sede en Cataluña, (...), pero la proporción ha bajado a una de cada cinco".

El programa económico del PSC defiende que entre los objetivos del Gobierno de la Generalitat debe estar crear "un triángulo territorio-empresas-educación sobre la base de un territorio cohesionado, unas empresas dinámicas y unos ciudadanos bien formados y educados". Los socialistas señalan que ello constituye "las bases para el desarrollo del país y del bienestar de los ciudadanos". Los socialistas defienden que "la Generalitat no ha de invertir tanto en la actividad productiva como en liberar las energías del sector productivo y dar apoyo a todas las iniciativas líderes".

Educación y formación

El programa establece una relación directa entre el esfuerzo que se debe realizar en materia de educación y el aumento del empleo que se produce. "Daremos un nuevo impulso al ligamen educación-ocupación (...) y superaremos el desánimo de la comunidad educativa, la desorientación de los profesionales y la insuficiencia de inversiones, recursos y proyectos que han caracterizado estos últimos años", señala el programa del PSC.