Ríos de cemento

Para algunos granadinos el Genil ya no es un río, al menos cuando transita por el centro de la capital. Las obras de acondicionamiento que se llevaron a cabo en el cauce con motivo de los mundiales de esquí lo transformaron en un "canal de cemento, con aguas estancadas, sucias y malolientes, que provocan las continuas protestas del vecindario". De esta manera lo describe Javier Egea, miembro de Ecologistas en Acción y responsable de la campaña Ríos Vivos, para el que "la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) sigue empeñada en destrozar el Genil con obras inútiles, antiecológicas y caras". Consumada la alteración del tramo urbano de este río, los ecologistas no están dispuestos a tolerar un nuevo proyecto de encauzamiento, que en esta ocasión afectaría a unos seis kilómetros de cauce, los únicos que quedan, en estado seminatural, a la entrada de la ciudad. Según la CHG, estas obras, que ya han salido a licitación pública por un importe cercano a los 2.000 millones de pesetas, son necesarias para defender la Vega de Cenes, y la propia urbe de Granada, de posibles avenidas. Se excavaría un nuevo lecho, de entre 32 y 42 metros de anchura, protegido por muros de hormigón de 4 metros de altura, colocando un paseo y vías de servicio en cada una de las riberas y plantando algunas especies vegetales en los taludes.

Los estudios efectuados por Ecologistas en Acción ponen en entredicho la utilidad de este encauzamiento artificial. A juicio de este colectivo, no existe riesgo de avenidas ya que la cuenca del Genil se encuentra totalmente regulada por los embalses de Quéntar y Canales, y la zona de recogida de aguas, presas abajo, es tan pequeña que difícilmente podría provocar una inundación, como se ha comprobado en los años de fuertes lluvias.

En cualquier caso, los ecologistas creen suficientemente demostrado que una adecuada protección vegetal de las orillas, unida a una pequeña llanura de inundación para casos excepcionales, cumpliría la función de defensa que pretende la CHG, "sin necesidad de recurrir al cemento ni alterar el cauce". Por eso no se han limitado a criticar el proyecto de confederación, sino que han elaborado una alternativa viable, alternativa que durante estos días se está exponiendo a otros colectivos para sumar apoyos.

Ecologistas en Acción propone el establecimiento de un parque fluvial a lo largo de la zona en cuestión. Además de delimitar el dominio público hidráulico y adquirir algunos terrenos para extender la llanura de inundación, se procedería a una intensa revegetación con árboles (sauces, álamos blancos, chopos, fresnos, olmos, tarajes) y arbustos (rosales silvestres, majoletos, sahúcos, avellanos, durillos, gayombas) autóctonos, de manera que las riberas se convertirían en un jardín botánico surcado por sendas peatonales. En distintos tramos del río se levantarían puentes de madera, y se procedería a la retirada de las basuras y escombros depositados en las orillas.

En lo que se refiere a los vertidos que actualmente se realizan al cauce, la propuesta ecologista contempla la inmediata construcción o puesta en marcha de las depuradoras de Pinos Genil, Quéntar, Dúdar y Cenes, todas ellas incluidas en el correspondiente plan director de la Diputación y que, por tanto, solo necesitarían del correspondiente impulso político.

Exceptuando este último capítulo, las obras del parque fluvial no costarían más allá de 200 millones de pesetas, frente a los 2.000 presupuestados para el encauzamiento que defiende la CHG. "Haciendo comparaciones, aunque a veces sean odiosas, vemos que el Parque García Lorca ocupa menos de ocho hectáreas y ha costado cerca de mil millones de pesetas, mientras que el parque fluvial necesita una inversión cinco veces menor y se extiende a lo largo de 25 hectáreas", concluye Javier Egea.

Para que los granadinos puedan conocer de cerca la zona objeto de polémica, y valorar las características de cada una de las propuestas, se ha señalizado un sendero por la orilla izquierda del Genil y se ha invitado a los centros educativos de la capital, y de los municipios de Cenes y Pinos Genil, a que realicen actividades didácticas ligadas al cauce y sus elementos naturales.