El SAS calcula que este año 900.000 personas se vacunarán contra la gripe

Los datos cantan. Sólo un 10,7% de los 818.105 andaluces que padecieron la gripe el año pasado tenía más de 65 años. "Esto demuestra que los grupos de riesgo, entre los que se incluyen las personas mayores y quienes padecen alteraciones de tipo cardiovascular y pulmonar, están debidamente protegidos contra esta enfermedad", dice María Antigua Escalera, directora general de Salud Pública, que acaba de anunciar el comienzo de la Campaña de Vacunación Antigripal 1999-2000. En cualquier caso, el SAS administrará este año 900.000 dosis para inmunizar a otros tantos pacientes; el gasto previsto es de 370 millones de pesetas.

Pero no a todo el mundo le sienta bien vacunarse contra la gripe; ni todos los virus que la generan son iguales. Los hay de tres tipos: A, B y C. El tipo A se divide, a su vez, en tres subtipos: H1N1, H2N2 y el H3N2. Por ejemplo, el invierno pasado los andaluces tuvieron que vérselas con los virus B y H3N2. "Contra el B no hay problema, porque, al ser un virus estable, acumulamos defensas contra él cada año", explica el epidemiólogo Javier García León. "En cambio, los virus H3N2, o cualquier otro subtipo del A, mutan con facilidad y generan las gripes más graves", añade. Por eso, cada año, la vacuna antigripal cambia en su composición con el fin de lograr ser eficaz. Este año, sin embargo, los epidemiólogos, como los hombres del tiempo, hacen predicciones y no esperan grandes novedades en el comportamiento de los virus de la gripe. Los especialistas aseguran que vuelven los mismos que atacaron a la población el último invierno. Eso sí, anuncian la mayor virulencia gripal entre mediados de enero y el 15 de febrero. El Grupo de Vigilancia Especial contra la gripe, formado por 20 médicos, tomará muestras semanales en más de 1.700 puntos de Andalucía y las remitirá al Hospital Virgen de las Nieves de Granada para su análisis. "No siempre es gripe lo que se padece; con frecuencia la confundimos con un resfriado. El año pasado, de las 940 muestras analizadas, sólo 253 eran de gripe", recuerda García León, que añade: "La gripe no se cura, pero sí pueden evitarse o amortiguarse mucho los síntomas, vacunándose contra ella". Y debe ser cierto porque, si en los años 80 se certificaban en Andalucía 300 defunciones anuales por culpa de la gripe, en 1996 esta cifra se había reducido a 46 fallecimientos. El invierno pasado enfermaron de gripe un 11,2% de los andaluces; por provincias, llama la atención que sean las costeras Almería y Huelva, con 19,7 y 16 casos por 100 habitantes respectivamente, las más afectadas. En el otro extremo se sitúa Jaén con sólo 8,9 casos. La media andaluza fue de 12,2 casos por cada cien habitantes. "Esto no quiere decir nada. El virus no entiende de temperaturas; sí, en cambio, se siente muy a gusto en los espacios cerrados y en donde haya mucha gente", puntualiza el epidemiólogo. Chequeos rigurosos En el consultorio de la calle Amador de los Ríos (Sevilla), un numeroso grupo de personas mayores aguarda impaciente su turno de consulta o para vacunarse. En cuanto se les pregunta por la vacuna antigripal se arma el guirigay. La división de opiniones arrecia. "A mí me entró como un tiro la única vez que me la puse; sin embargo, a mi marido, le sienta muy bien", dice Antonia Pérez, 71 años, que invita al marido a explicarse. "Sí", puntualiza él, Rafael Carambolo, de 75 años: "Yo me la pongo todos los años y, aunque alguna vez me ha atacado la gripe, la he pasado muy bien". Al oírle, Juan Luque, también septuagenario, murmura por lo bajo: "Lo que no se dice aquí es que es letal para algunas personas". "Algo absolutamente incierto", asegura la directora general de Salud Pública, que añade: "Los chequeos a quienes se vacunan son muy rigurosos, precisamente para evitarle cualquier complicación". La realidad es que la Junta ha administrado, desde 1985, cuando se inició la primera campaña de vacunación antigripal, más de 12 millones de dosis. Los estudios realizados sobre la eficacia de esta vacuna confirman que en el 70% de los casos se evita la gripe y en el otro 30% se debilitan mucho sus efectos.