Los fiscales piden 15 años de cárcel por un homicidio tras una riña de tráfico

La Fiscalía y la acusación particular piden 15 años de prisión por homicidio para Rafael Moreno Amaya, procesado por la muerte de David Fernández Aceituno, que se produjo tras una discusión de tráfico en octubre de 1998. La defensa solicita la absolución del acusado al alegar que no fue él, sino su cuñado, José Maldonado, quien propinó la puñalada que causó la muerte al joven de 23 años. El juicio contra Rafael Moreno se celebró ayer en la Audiencia de Jaén con un jurado popular.

Según la versión del fiscal y la acusación, los hechos ocurrieron cuando el acusado, su mujer y su hijo regresaban de la Feria de Jaén a su domicilio, en el barrio del Polígono del Valle. Al cruzar una calle, David Fernández, que iba acompañado de su novia, puso en marcha su vehículo. Rafael Moreno interpretó que la maniobra del vehículo había estado a punto de herir a su hijo, lo que originó una violenta discusión en el transcurso de la cual sacó una navaja y asestó a David Fernández una puñalada que le provocó, dos horas después, la muerte. Pero la versión de la defensa es diferente. Afirma que cuando iban a su casa se encontraron con el cuñado y continuaron la marcha los cuatro. Sin embargo, Rafael Moreno se retrasó un poco al sentirse mareado, pues había bebido algunas copas. La pelea se produjo pero, según el abogado, fue el cuñado quien asestó la puñalada a David Fernández. Alertado por los gritos, a Rafael Moreno sólo le quedó tiempo para quitar la navaja a su cuñado, tirarla y huir con su familia. La estrategia de Fiscalía y acusación se centra en las contradicciones que hay entre esta última versión y la que, por separado, dieron en un principio el propio Rafael Moreno y su familia. El se declaró autor de los hechos ante la policía y el juez, pero luego cambió la narración de los hechos. Durante el juicio afirmó que se había declarado culpable porque tenía miedo de su cuñado y porque los policías le habían amenazando con "un palizón". Su cuñado estaba citado a declarar como testigo, pero no compareció. De las tres partes, sólo la defensa consideró imprescindible su presencia, por lo que solicitó la suspensión del juicio, petición que fue denegada. La novia del fallecido declaró que la pelea se produjo con el acusado y dijo que allí no estaban más que él, su mujer y su hijo.