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Más de la mitad de los padres se consideran peor preparados que sus hijos

Donde más se aprende es en casa, se consolaban los abuelos en épocas de penuria escolar y de mayor afición por los refranes. Y resulta que es lo que piensa ahora la mayoría de los padres, según una encuesta del Instituto de Evaluación y Asesoramiento Educativo, realizada para la Fundación Hogar del Empleado. El 55,6% de los padres considera que sus hijos están mejor preparados de lo que ellos lo estaban a su edad.

"La familia es unánimemente considerada como el factor de mayor influencia en la educación", afirma el estudio presentado ayer en Madrid por el profesor Álvaro Marchesi, ex secretario de Estado de Educación y director ahora del Instituto de Evaluación y Asesoramiento Educación (IDEA). El 95% de los padres encuestados colocan a la escuela en segundo lugar de influencia para sus hijos (90%); en tercer lugar, a los amigos (63,7%), después a los medios de comunicación (38,8%) y por último el pertenecer a algún grupo organizado (28,3%).Poco interés por aprender

Los padres son críticos con los hijos cuando se les pide que valoren su interés por aprender: un 42,3% sostiene que los chicos y chicas muetran escasa motivación en adquirir nuevos conocimientos. Otro tópico que se derrumba es el de la regular fama de los profesores. La mayoría de los padres tiene una opinión bastante buena del colectivo docente, y también de la enseñanza y la atención que reciben sus hijos en los colegios. El 71,3% de los padres está bastante o muy satisfecho con la manera de enseñar de los profesores de sus hijos; el 72,9% aplaude la atención que reciben del tutor, el 70,5% se declara a gusto con el ambiente que ve en el centro escolar y el 67,9% dice que respalda los valores que transmite.

Los padres respaldan también los cambios introducidos por la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE), como la prolongación de la escolarización obligatoria hasta los 16 años, el trato individualizado a los alumnos y la integración de escolares discapacitados o con otras necesidades educativas especiales.

En lo negativo, Álvaro Marchesi, uno de los redactores de la LOGSE, subrayó el hecho de que la mayoría de los padres diga que la educación que reciben sus hijos no se adapta a las exigencias del mercado laboral. "Pese a las reformas que se han hecho en los contenidos, los padres creen que han sido pocas y que hay que ir más allá", comentó el director de IDEA. Más de un tercio de los padres (34,9%) se queja de esos desajustes.

Son los padres de secundaria y los que tienen estudios superiores los que se manifiestan más críticos cuando se pronuncian sobre ese divorcio entre estudios y mercado laboral.

Otra conclusión llamativa del estudio es que las familias afirman de manera clara que la comunicación entre padres y profesores es un factor determinante de la buena marcha de sus hijos en la escuela.

El sondeo ha sido realizado con encuestas a 2.400 padres de Madrid, elegidos en una proporción similar al reparto entre la escuela pública y privada existente en España.

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