El cambio de pareja de Rupert Murdoch, otra clave en el mundo de los imperios de comunicación

The New York Post, que ha revelado la petición de divorcio hecha por la esposa de Redstone, fue también el periódico que dio cuenta de las dificultades personales de su dueño, Rupert Murdoch, tras 31 años de matrimonio con Anna, su segunda esposa. Pero lo hizo por medio de una escueta filtración controlada. Después, todo el imperio al que pertenece -que incluye los estudios y la cadena televisiva Fox, compañías televisivas en Asia, la británica BskyB, diarios como The Times y The Sun, una cadena australiana de periódicos, la editorial Harpers Collins o los equipos Los Angeles Dodgers y Los Angeles Lakers- dio por cerrado ese capítulo. La mera comunicación de que ambos habían alcanzado un acuerdo amistoso y el silencio absoluto del círculo próximo a Murdoch levantaron una muralla respecto a lo que pudo ser una crisis en News Corporation, la empresa matriz del imperio, de la que Anna era miembro del Consejo de Administración. Apenas se ha podido conocer que ella tendrá derecho a opinar en caso de venta de la compañía, valorada en 4,5 billones de pesetas.Rupert Murdoch obtuvo el divorcio el 8 de junio y casó de nuevo, el 25 del mismo mes, con Wendi Deng, empleada de una sus empresas asiáticas, 36 años más joven que él y de la que se ignora casi todo.

No sólo ha estado en juego la unidad de un grupo tan grande, sino la sucesión del magnate. Antes del divorcio se especulaba acerca de cuál de los hijos de Rupert y Anna Murdoch heredaría su imperio: Elisabeth, de 31 años; Lachlan, de 27, o James, de 26, puesto que la primera hija, Prudence, parece fuera de la línea de sucesión como fruto del primer matrimonio de Murdoch. Pero tras el cambio de pareja, un directivo que no es de la familia, Peter Chernin, ha sido impulsado al primer puesto ejecutivo. "Probablemente me gustaría que Peter fuera el jefe ejecutivo. Puede que mi hijo mayor sea el presidente. No lo sé", comentó Murdoch a Newsweek.