Caixa de Catalunya protege 15.000 hectáreas de espacios naturales de interés

Caixa de Catalunya, a través de la Fundación Territorio y Paisaje, ha comprado este año más de 6.000 hectáreas de terreno en varias zonas de Cataluña y ha firmado convenios de gestión y adquirido derechos de uso sobre otras 8.000 con el objetivo de protegerlas como espacios naturales. En total, la fundación protege alrededor de 15.000 hectáreas de territorio de alto valor natural y paisajístico, lo que equivale a casi el 0,5 % de todo el territorio catalán. Jordi Sargatall, director de la fundación, que fue creada en diciembre de 1997 y comenzó sus actividades en abril del pasado año, presentó ayer la memoria de las actuaciones que realizó la entidad en 1998 y explicó los planes que pretende llevar a cabo el próximo año. De los 450 millones que la fundación ha invertido este año -en el año 1998 fueron 126 millones-, el 70% se ha dedicado a la adquisición de espacios naturales La reintroducción de la nutria en el Rosselló y la compra de los derechos de tala de 10 bosques subalpinos en el Pallars, con lo que se evitará su deforestación, destacan entre las actividades realizadas este año por la Fundación Territorio y Paisaje. Además la entidad persigue conseguir el próximo año la preservación del quebrantahuesos, águilas y otras especies autóctonas en peligro de extinción. Las cerca de 15.000 hectáreas protegidas por la fundación de Caixa de Catalunya conforman 22 zonas distintas del territorio catalán. De ellas, 4 están gestionadas en convenio con ayuntamientos, 10 pertenecen a bosques comprados para evitar la tala de árboles y 8 son propiedad de la fundación; entre las últimas se encuentra la montaña de Alinyà, situada en el Prepirineo del Alt Urgell, que, con sus 5.800 hectáreas, es la finca privada más grande de Cataluña. Gestión privada El ecólogo Ramon Folch, asesor de la fundación, destacó la importancia de esta nueva forma de gestión privada de territorios naturales siguiendo el modelo británico y norteamericano, que definió como una "acción civil a través de la acción privada". Por su parte, Sargatall apuntó que con este sistema se persiguen dos objetivos: la conservación de la naturaleza y la educación ambiental. La Fundación Territorio y Paisaje prevé tener terminado en la primavera del año 2001 Les Planes de Son, un centro de naturaleza y desarrollo sostenible. El centro se está construyendo en el pueblo de Son, situado junto al parque nacional de Aigüestortes i Sant Maurici. El nuevo centro, disimulado entre el paisaje, está destinado a convertirse en un espacio de educación ambiental para escolares, universitarios, estudiosos y el público en general, e incorporará una nueva metodología a la educación medioambiental: "La seducción ambiental del territorio", así la definió Sargatall. Otro de los terrenos adquiridos por la fundación es el desfiladero de Mont-rebei, una zona de 604 hectáreas situada en la sierra del Montsec, en la provincia de Lleida, en el límite entre Aragón y Cataluña, además de otros espacios fluviales en la Cerdanya y en el Segriá, y 88 hectáreas en la sierra de Prades.