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Un millar de vecinos se manifiestan en Les Corts contra el proyecto Barça 2000

Barcelona Un millar de vecinos de Les Corts se manifestaron ayer tarde contra el proyecto Barça 2000 que el club Blaugrana quiere levantar en los aledaños del Nou Camp. Núñezlandia, como ya empieza a conocerse entre el vecindario, suscita un rechazo creciente en un distrito fuertemente castigado por el tráfico que teme el colapso si finalmente los promotores del parque temático logran abrir un recinto que calculan atraería a 7,5 millones de visitantes al año, más que el complejo lúdico Port Aventura, con el agravante de producirse en el centro de la ciudad. -

La manifestación discurrió por la Travessera de les Corts desde la calle de Arístides Maillol hasta la sede del distrito, ocasionando un considerable atasco frente al que la Guardia Urbana tardó en reaccionar ante lo que estuvo a punto de acabar en atropellos en varias ocasiones, debido a la presencia de conductores impacientes. Entre los residentes del distrito crece la sensación de que nada será igual si el Barça saca adelante planes que incluyen 28 salas de cine, tres museos deportivos, cuatro pabellones temáticos, un estadio audiovisual, restaurantes y agencias de viaje que suman 110.000 metros cuadrados de techo, superficie equivalente a 2,5 estadios. "Salvemos Les Corts, Barça 2000 no" fue una de las consignas más coreadas. Al término de la marcha, una delegación de vecinos hizo entrega al concejal del distrito, el socialista Jordi Hereu, de las casi 7.000 firmas recogidas para pedirle al Ayuntamiento que pare el proyecto. El presidente de la plataforma cívica, que agrupa a ocho asociaciones de vecinos y a tres entidades culturales entre las que figura la Asociación de Amigos de la Ciudad, solicitó a Hereu que frene el plan "por lo que representa de especulación", manifestó Lleonard Ramírez. El edil se mostró receptivo hacia la preocupación que suscita el parque temático y aseguró que a partir del próximo día 30, cuando finalice el periodo de información pública del proyecto, se abrirá una nueva etapa que sentará las bases de un "proyecto de consenso y diálogo", con todas las partes implicadas. Hereu insistió que mantendrá abiertas líneas de diálogo con el club y con las asociaciones de vecinos. A la marcha se sumaron también vecinos de la Barceloneta que sostenían una pancarta en la que se leía "Solidaridad con la Barceloneta, fuera Maremagnums". Las entidades convocantes tuvieron mucho interés en desligar, como de costumbre, su rechazo al proyecto de la afición futbolística. Por este motivo, cortaron cualquier intento de algún espontáneo que pretendía sumarse a la marcha para arremeter contra el presidente del club por cuestiones deportivas. Las movilizaciones de la plataforma están consiguiendo un amplio eco entre determinados colectivos profesionales de barceloneses como los arquitectos.

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