El metro de la Margen Izquierda concluye la excavación de sus casi 5 kilómetros de túneles

Dos años y medio después de que comenzaran las obras, el metro de la Margen Izquierda tiene ya excavados los 4,7 kilómetros de túneles por donde discurrirá en su primera fase, entre Bilbao y la entrada de Sestao. La unión del último túnel pendiente se produjo ayer, a 45 metros de profundidad y justo debajo de la ría del Nervión, entre Bilbao y Barakaldo. Las autoridades aseguraron que los plazos se cumplen y anunciaron que esta nueva línea estará operativa en octubre del 2001. Cerca de 80.000 usuarios podrán entonces acceder a Bilbao en 10 minutos.

Pasadas las 11.30 horas, el tercero de los túneles construidos lograba el cale, el encuentro entre dos frentes según el argot de los trabajadores de este tipo de instalaciones. En este tramo se han excavado 1,4 kilómetros, de ellos más de 100 metros bajo la ría. Los otros dos túneles perforados, bajo el centro de Barakaldo, se unieron en diciembre de 1998 y mayo pasado, respectivamente, tras excavar más de 2,3 kilómetros. Los trabajos para lograr el cale bajo la ría han sido los más dificultosos, debido a la dureza de la roca. El acto de ayer, ante periodistas y autoridades, se prolongó más de lo previsto debido a esta circunstancia, según afirmó el viceconsejero de Obras Públicas, Antonio Aiz. La apertura de la pared de 2,5 metros que separaba los dos equipos de excavación permitió que el consejero de Obras Públicas, Álvaro Amann, que esperaba en la Margen Derecha junto al alcalde de Getxo y concejales del Ayuntamiento de bilbao, se desplazara hasta Barakaldo por el túnel del metro. Allí estaban el lehendakari Juan José Ibarretxe y el diputado general de Vizcaya, Josu Bergara, entre otras autoridades. La construcción del metro de la primera fase de la Margen Izquierda queda así completada en la perforación de galerías subterráneas. Tan sólo resta realizar el último tramo, que se acometerá al aire libre, mediante un viaducto. Esta línea discurrirá entre la estación de San Ignacio, en Bilbao -donde conecta con la actual línea 1- y Urbinaga, en Sestao. Atravesará todo Barakaldo y contempla la construcción de cinco nuevas estaciones: Cruces, Ansio, Santa Teresa, Bagatza y Urbinaga. Hasta ahora se han extraído en la excavación medio millón de metros cúbicos de tierras -que se han destinado a rellenos en la ampliación del Puerto de Bilbao y otras obras-, un volumen equivalente a la superficie del campo de fútbol de San Mamés con una altura de tierras de 18 metros, o sea un edificio de seis plantas. Tanto los responsables del Gobierno vasco como de la Diputación vizcaína remarcaron ayer el cumplimiento de los plazos de ejecución de los trabajos. Según sus previsiones, a mediados del próximo año comenzará la instalación de las escaleras mecánicas y el resto de obras de la superestructura del suburbano. La previsión es que entre en funcionamiento en octubre del año 2001. Josu Bergara destacó que, con la unión de estos túneles, "es la tercera vez que el metro salva la ría" y calificó este medio de transporte como el "primer elemento activo para el desarrollo de la Margen Izquierda". Sin embargo, aseguró que no "podremos decir que tenemos metro en Vizcaya hasta que concluya la línea 2" en el tramo Sestao-Santurtzi, previsto para el año 2006.