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El Gobierno asturiano legaliza el polémico complejo hípico del alcalde de Oviedo

La nueva Administración socialista asturiana ha legalizado el magno complejo hípico de Oviedo una vez que el Ayuntamiento de la ciudad, gobernado con mayoría absoluta por el PP, procedió durante los últimos nueve meses a regularizar la obra, que fue acometida por decisión del alcalde ovetense, Gabino de Lorenzo, sin disponer de ninguno de los permisos y licencias preceptivas. De Lorenzo, propietario a título particular de un importante negocio caballar, anunció la legalización del complejo hípico por el Principado y aseguró que el Ayuntamiento ovetense no volverá a incurrir en la ejecución de obras sin autorización. La construcción del complejo hípico se acometió sin el necesario permiso de los organismos regionales competentes y sin ni tan siquiera la aprobación ni conocimiento oficial de la propia corporación municipal ovetense. Además, su coste superó los 3.000 millones de pesetas, casi diez veces más del presupuesto inicial, que rondaba los 400 millones.

El pasado mes de enero, el vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos, restó importancia al caso y aseguró que el único problema de la obra es que le faltaba un papel. El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, del PP, hizo público que el Ayuntamiento ya dispone de todos los permisos de la Administración regional y de los órganos competentes de la administración central en Asturias para la apertura del complejo equino este mismo fin de semana con la celebración de varias pruebas ecuestres.

El miércoles, el Ayuntamiento recibió el preceptivo informe favorable de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA), el último trámite pendiente para normalizar una situación irregular. "En algún momento hemos trabajo sin los permisos pertinentes. Lo reconozco. Ha sido un error. Pero errores cometemos los humanos. Y hay que rectificar. Espero que no los volvamos a cometer y que todas las obras que haga el Ayuntamiento de Oviedo gocen previamente de todas las autorizaciones", manifestó De Lorenzo.

Hace nueve meses, el Principado de Asturias, presidido entonces por Sergio Marqués, enfrentado a la dirección del PP, ordenó la paralización de las obras. El Ayuntamiento desoyó repetidamente la orden y continuó durante algún tiempo con los trabajos de remate.

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