Los 'narcos' iraníes que secuestraron a los españoles quieren liberar a dos de sus jefes
El ministro iraní de Interior, Abdulvahed Musavi, identificó ayer como traficantes de drogas a los secuestradores de los tres ciudadanos españoles, un italiano y un iraní, y dijo que confía en una rápida solución del caso. "Los principales autores [del secuestro] han sido identificados y esperamos que la liberación se produzca lo antes posible", declaró Musavi a la salida del Parlamento iraní. A cambio de su libertad, los captores han exigido la excarcelación de dos de sus cabecillas, según informaron las autoridades iraníes a representantes de la Embajada de España en Irán.
"Por el momento, las autoridades iraníes trabajan sobre esta hipótesis y han designado un intermediario para continuar las negociaciones con la banda de narcotraficantes", señaló ayer el encargado de negocios de la Embajada española en Irán, Juan Gafo. "Parece ser que los secuestradores pertenecen a un clan local de traficantes de drogas que hace unos días mantuvo un enfrentamiento con las fuerzas de seguridad iraníes, en el que hubo cinco muertos y dos detenidos", añadió.Gafo recalcó que tanto las autoridades españolas como las iraníes quieren evitar cualquier tipo de actuación que implique peligro para las vidas de los secuestrados, el dominico Cosme Puerto, de 57 años; el franciscano Joaquín Fernández, de 70, y el informático Pedro García, de 34. Los ciudadanos españoles fueron capturados junto al italiano, Massimo Catabriga, y el guía iraní, Rahmatollah Soleimani, el sábado por la noche cuando cenaban en el hotel Gubashir, de Kermán, a unos 800 kilómetros al sureste de Teherán.
Tres hombres y dos mujeres, armados con pistolas y rifles de asalto AK-47, se llevaron a la fuerza del restaurante a los españoles y al iraní, y al italiano lo sacaron de su habitación. Preocupa especialmente la salud del sacerdote Joaquín Fernández, confirmó Gafo, "debido a su avanzada edad, aunque están todos en buen estado". No se puede predecir el tiempo que va a durar este secuestro, dijo Gafo, "pero estamos trabajando para que sea lo más breve posible".
"Se encuentran bien"
Algunos periódicos iraníes publicaron ayer unas declaraciones de un portavoz del Ejército en las que asegura que los secuestrados "se encuentran bien y no han sufrido daños". "Según las últimas informaciones, los rehenes están seguros y no se les ha hecho ningún daño", declara el portavoz, del que no se menciona el nombre, a la prensa.
De acuerdo con los comentarios que le atribuyen los periódicos iraníes, no confirmados por fuentes occidentales, "los bandidos los tienen retenidos en la propia Kermán, o en el vecino Sistan-Baluchistan". La provincia de Sistan-Baluchistan, fronteriza con Pakistán, es una de las principales rutas del contrabando de drogas entre ese país y Afganistán. Desde hace varios años, las fuerzas de seguridad iraníes intentan acabar con este comercio y mantienen en la zona constantes enfrentamientos armados con los traficantes.
En opinión de las autoridades iraníes, la acción de los secuestradores se debe a "las recientes victorias de las fuerzas de seguridad contra los traficantes, que intentan acabar con los esfuerzos oficiales para atraer a turistas a Kermán". Durante los últimos meses, el presidente de Irán, Mohamed Jatamí, está intentando promocionar el turismo mediante una amplia oferta de visitas a palacios persas, mezquitas islámicas y bazares, con excelentes productos de artesanía.
Propaganda aperturista
La expedición española la integraban cuatro mujeres y cinco hombres que habían comenzado una gira por Irán hace cinco días, "animados por la reciente propaganda aperturista sobre este país", según dijo el domingo, desde el hotel Gubashir, una de sus integrantes, que pidió mantener el anonimato. Las autoridades iraníes condenaron la captura de los turistas como una acción "vil e inhumana" y han movilizado a las fuerzas de seguridad del Estado en el sureste del país.Los compañeros de viaje de los tres españoles secuestrados no han querido abandonar el país y ayer continuaron su gira turística por la región de Kermán con la esperanza de que sus amigos sean liberados rápidamente. El grupo, de dos hombres y cuatro mujeres, que visitará Shiraz, en la zona turística de Persépolis, a dos horas de Kermán, viaja escoltado por fuerzas iraníes. "Por el momento, no han decidido regresar a España", añadió el representante español, que recomendó a los turistas españoles que se encuentren en Irán, y a los que tengan intención de viajar allí próximamente, abstenerse de visitar el sur del país por el peligro que entraña la zona.
